Con el pedido de una ley de drogas que despenalice la tenencia para consumo personal y la no persecución penal al auto-cultivo de cannabis como bandera, Rosario se sumó este sábado a la Marcha Mundial de la Marihuana.

Una nutrida columna se concentró en plaza San Martín y se movilizó por el centro de la ciudad hasta el Monumento a la Bandera, en reclamo de "una política de drogas más Justa, más Eficaz y más Humana".

Alan Monzón/Rosario3.com

Desde la Asociación de Reducción de Daños de la Argentina (Arda), una de las convocantes, valoraron la cantidad de "concentraciones, marchas y encuentros en varias ciudades del país mediante la autoconvocatoria de diversas organizaciones de ciudadanos usuarios, de los derechos civiles, de asociaciones de auto-cultivadores, de la cultura cannábica, de usuarios y profesionales de la salud por el uso medicinal del cannabis, para peticionar por una nueva ley de drogas que abandone definitivamente todo tipo de persecución penal a los ciudadanos usuarios de drogas".

"Reclamamos una clara política de reducción de daños y no la política actual, que expone a una maximización de los riesgos y daños donde los jóvenes pueden terminar internados por sobredosis, en situaciones de alto riesgo para sus vidas o detenidos", añadieron.

La Marcha Mundial de la Marihuana se hace cada año desde 1999 el primer sábado de mayo con el fin de "terminar con la criminalización y persecución de los usuarios y cultivadores y el reconocimiento de los usos medicinales e industriales del cannabis y la regulación del acceso al mismo".

Preso por una planta

Familiares de cultivadores detenidos y activistas por la despenalización se reunieron también en la Plaza de Mayo de Buenos Aires. "Mi hijo está privado de su libertad desde el 6 de marzo. Hoy se cumplen dos meses del allanamiento. Entraron a casa porque un vecino hizo una denuncia. En ese momento Lautaro tenía una planta. Era un estudioso del tema, estaba en contacto con un oncólogo para investigar sobre el uso medicinal del aceite", contó a Télam Alicia Ferraro, quien participó de la movilización.

Lautaro Ferraro tiene 25 años, estudia economía y vivía con su madre en San Martín, provincia de Buenos Aires, donde cultivaba plantas para fabricar aceite cannábico medicinal que servía para calmar los dolores que sufren por distintas enfermedades su madre y su pareja. Desde hace dos meses, el joven está detenido en la unidad penitenciaria 48 de José León Suárez.

"Si queda firme la prisión preventiva puede pasar a un penal. Mi hijo es una persona de bien, no me lo imagino en un penal", continuó la madre.

La ley que permite el uso medicinal del cannabis fue aprobada por el Congreso nacional el 29 de marzo último y una de las exigencias de los asistentes a la marcha es la "urgente reglamentación y la incorporación del cultivo solidario y colectivo".

El artículo 13 de la ley establece que "la autoridad de aplicación debe reglamentarla dentro de un plazo no mayor a 60 días desde su publicación Boletín Oficial", que fue el 19 de abril último.