No se puede pero... La promoción de la prostitución es un delito aunque se cometa a la vista de todos. Un ejemplo de ello es un cartel colgado en zona sur, donde se publicita una página web condicionada en la que se ofertan servicios sexuales. La permanencia de este pasacalle llama la atención, sobre todo hoy que se conoció el procesamiento de 4 personas por el caso del sitio Supergatitas.com.

El periodista Fernando Carrafiello (A Diario, Radio 2), comentó este miércoles la presencia de un pasacalle en bulevar Oroño y Virasoro que promociona al sitio Manilarosario.com. Se trata de un portal en el que, a través de fotos altamente eróticas, se puede contactar a mujeres y travestis para mantener encuentros a cambio de dinero.

La prostitución no está prohibida ni constituye un delito, pero sí en cambio, su promoción. Es decir, una persona que intercambie sexo por dinero no puede ser penada pero sí quien promueva que otras personas lo hagan. En este marco judicial se encuadra la investigación del funcionamiento de Supergatitas.com, causa en la que ya hay cuatro procesados por explotar sexualmente a jóvenes.

Incluso, en nuestra ciudad, rige una ordenanza que impide la habilitación de lugares donde se ejerza la prostitución, al tiempo que, a nivel nacional, también se pena la publicación de avisos clasificados.

Sin embargo, la oferta de sexo no ha disminuido. Tampoco el ejercicio de la prostitución. El cartel de zona sur da cuenta de ello, los papelitos que pegan en los autos con fotos hot, también. Lo mismo sucece en hoteles y hoteles alojamientos, en donde, muchas veces, se accede a estos intercambios.

En cambio, se puede establecer que el ejercicio de la prostitución se ha reconvertido. Imperan los llamados departamentos privados en donde personas mantienen relaciones sexuales por dinero y los contactos entre ellos, se concretan a través de Internet. Mientras tanto, sigue vigente la denominada prostitución callejera que expone a quienes la ejercen a situaciones peligrosas y violentas, así como también a enfermedades.

Más información