En medio de la tensión que viven funcionarios judiciales por la seguidilla de balaceras desde el 29 de mayo a la fecha, comenzó la revisión de la resolución de primera instancia contra la banda Los Monos en el Centro de Justicia Penal.

Los defensores de los principales cabecillas de la organización cuestionaron varios puntos de la decisión dada a conocer el pasado 9 de abril.

Entre otras cosas, hicieron hincapié en la supuesta parcialidad de dos de los jueces del tribunal y de los encargados de instruir la causa tras el asesinato de Martín “Fantasma” Paz.

La primera audiencia comenzó puntual, según lo previsto. Un celoso operativo policial pudo verse en el interior del edificio, similar al aplicado en el juicio. Hubo hasta agentes en los techos del segundo piso.

Las camaristas Gabriela Sansó, Bibiana Alonso y Carolina Hernández se sentaron en un espacio que no es habitual para los jueces de segunda instancia, que desarrollan sus funciones en los antiguos Tribunales provinciales.

Pocos condenados/absueltos en primera instancia dieron el presente, entre ellos, Lorena Verdún; Silvana Gorosito; Roberto Otaduy; Eduardo Enriquez; Sergio Blanche; y Ángel Avaca.

A través de una pantalla, que estaba subdividida en tres, estaban Ramón Ezequiel Machuca, alias Monchi Cantero; Mariano Salomón; y Walter Jure.

Los tres estaban juntos en la Unidad Penitenciaria N° 3 de Rosario, donde pasarán sus días mientras dure la apelación.

Además, Jorge Emanuel Chamorro presenció el debate oral y público desde el penal federal de Rawson, y Ariel Máximo “Guille” Cantero desde Resistencia, Chaco. 

Con murmullos de fondo de los internos que estaban vía videoconferencia, los abogados Carlos Edwards y Fausto Yrure apelaron primero el rechazo a la recusación de los jueces Ismael Manfrin y María Isabel Más Varela.

Entienden que ya habían tomado contacto con parte del material probatorio antes del juicio por haber integrado el tribunal que juzgó a Luis “Pollo” Bassi, Facundo “Macaco” Muñoz y Milton Damario por el asesinato de Claudio “Pájaro” Cantero.

En esa causa –remarcaron– accedieron a escuchas telefónicas que en aquel momento fueron consideradas legítimas y que meses después, en el juicio que terminó el 9 de abril, fueron objeto de debate por, justamente, la legitimidad.

Yrure fue quien tuvo más tiempo el micrófono. Tantos fueron los minutos que habló que tuvo que tomar varios vasos de agua y consumir pastillas de menta para recuperar el aliento.

El letrado, que defiende a varios acusados en el juicio, enfatizó en la supuesta cercanía entre el juez Juan Carlos Vienna –quien instruyó la causa– y Luis Paz, padre de Martín, cuyo asesinato en septiembre de 2012 derivó en la megacausa por varios homicidios dolosos y asociación ilícita.

Además, indicó que la brigada operativa de división judiciales “fue creada con el objetivo de investigar a los Cantero” y que no se conocieron más investigaciones sobre esa fuerza.

Recordó un diálogo entre Machuca y un agente de esa policía, de apellido Oviedo, donde el uniformado mencionó que la decisión de llevar adelante la causa “era una decisión de más arriba”, en alusión a altos funcionarios.

Edwards destacó el momento en el que se aceleró la investigación contra Los Monos: cuando detuvieron por segunda vez a Hugo Tognoli, ex jefe de la Policía, a principios de 2013. 

El abogado, que fue defensor de Tognoli, tomó declaraciones del ex gobernador Antonio Bonfatti tras la absolución del ex jefe de la fuerza de seguridad en el juicio por encubrimiento a narcos del sur provincial.

“Bonfatti dijo que se hizo justicia porque fue una causa armada por cuestiones políticas. Estoy de acuerdo, fue acertado. Con el mismo criterio hicieron esta investigación a través de un juez parcial”, comentó.

Cabezazos y transmisiones cortadas

La audiencia fue rápida, pero a la vez “pesada” por la carga de argumentaciones y recursos. Fue interrumpida, por algunos segundos, cuando se cortaron las transmisiones de las videoconferencias con Chamorro y después con Guille Cantero.

El que está alojado en Rawson, incluso, llegó a apoyar su frente sobre la cámara que lo enfocaba, como signo de cansancio. Lo mismo ocurrió con Verdún, que en un momento descansó en la silla donde estaba sentada, detrás de Yrure y Edwards.

Verdún, Guille Cantero, Chamorro y Salomón pidieron no presenciar más las audiencias. Sólo Machuca y Jure continuarán en pantalla desde este miércoles.

Si bien la jornada termino pasadas las 16, la próxima jornada la defensa volverá a la carga con apelaciones a las intervenciones telefónicas, que son la base de la acusación contra la organización. El turno de la Fiscalía, se presume, será recién la próxima semana.