La ex presidenta Cristina Kirchner ocupó este miércoles por primera vez su banca de senadora desde que fue electa en octubre para tratar el presupuesto 2018 en una sesión extraordinaria. Pero antes, pidió una cuestión de privilegio y habló sobre el desafuero que solicitó el juez federal Claudio Bonadio, quien la había procesado en la causa por supuesto encubrimiento a Irán en el caso Amia. Dijo que no hace falta constituir una comisión especial para tratar la solicitud del magistrado y expresó fuertes críticas contra el gobierno nacional.

“Se usa el disparate de una causa totalmente ridícula para afectar la representación”, criticó Cristina desde su banca. Detrás suyo, el senador nacional santafesino, Carlos Reutemann, que pocas veces se lo suele ver en el Congreso, seguía de cerca sus palabras.

La expectativa por la presencia de Cristina había crecido por un par de ausencias resonantes en reuniones de comisión y el aludido pedido de desafuero. Así, la solicitud de que sus pares traten este tema sorprendió a todos en el arranque.

Aunque las cuestiones de privilegio otorgar al senador que las pide diez minutos al uso de la palabra, Cristina se extendió por casi media hora y a pesar de la presidenta de la Cámara, Gabriela Michetti que la interrumpió en tres ocasiones.

Durante su alocución la ahora senadora bonaerense acusó al oficialismo de querer “una oposición de diseño” y alertó que así como al gobierno no le gusta la oposición que ella ejerce, a ella tampoco le gusta el el gobierno de Cambiemos. “Pero eso no quiere decir que usted (por Michetti) va a dejar de ser vicepresidenta”, observó en alusión al intento de removerla de su banca.

“Estamos ante una fuerte amenaza de cercenar la representación popular en el Parlamento recurriendo a métodos, procedimientos, formas que queríamos y creíamos desterradas de la política argentina”, advirtió. 

Con todo, es poco probable que los senadores traten este miércoles el pedido de desafuero contra Cristina. La de hoy será la última sesión del año en la que el gobierno espera que se apruebe lo que queda del paquete de leyes económicas; además del presupuesto del año que viene, una prórroga del Impuesto al Cheque hasta el 2022 y la Reforma Tributaria.