Dos jóvenes fueron detenidos este sábado a la tarde acusados de robar y balear a un remisero el viernes a la madrugada en Villa Gobernador Gálvez. Además, se encontró y secuestró el vehículo de la víctima.

Por otro lado, según informaron desde la Fiscalía, Horacio Colberg, de 52 años, permanecía internado con "muerte cerebral" por el disparo que recibió en la nuca.

La Policía de Investigaciones (PDI) informó que detuvo este sábado a la tarde a una pareja. Se trata de Martin C. y Karen T. La mujer arrestada tiene antecedentes por robos a taxis y remises.

El operativo se realizó a las 17.30 en la zona de Ayacucho al 5000. En el domicilio de los arrestados (jóvenes de entre 20 y 25 años), se secuestró el cargador de una metralleta, diez cartuchos punto azul, un rifle tipo carabina, un cargador de 9 milímetros, un revólver 22 largo y municiones de diverso calibre.

Además, la PDI encontró el auto del remisero en Ayacucho y Perican -un Chevrolet Corsa- a media cuadra desde donde se pidió el remis (ver imágenes de Periodicostodos.com). Se secuestró y se mandó a peritar para prueba balística y científica, precisaron las fuentes.

La mala es que la cámara de seguridad que estaba en la zona del hecho, y que había sido pedida por el fiscal momentos después del hecho, “no funcionaba por falta de mantenimiento”, comunicaron desde el centro de monitores de VGG.

La audiencia imputativa de los detenidos será el día lunes. Interviene el fiscal Florentino Malaponte y la PDI a cargo de Diego Sanchez.

Asalto y conmoción

El ataque se dio por un falso pasajero en un viaje que se inició en Ayacucho al 6700 y finalizaba en San Luis y José Ingeniero, en la localidad vecina a Rosario. En principio fue para robarle la billetera con la recaudación.

El chofer ingresó muy grave al Hospital de Emergencia Clemente Álvarez (Heca), desde donde su familia contó a El Tres detalles del hecho.

Por el asalto, amigos y compañeros de trabajo de la víctima realizaron el viernes piquetes en Villa Gobernador Gálvez. La protesta entró en estado de ebullición cuando vecinos quisieron eludir el corte. Hubo piñas, forcejeos y empujones. También piedrazos a los manifestantes. Los familiares y choferes volverían a movilizare para reclamar seguridad.