El leviatán, aquel monstruoso protagonista de numerosos relatos fantásticos, fue encontrado en el sur de Perú bajo la forma de un fósil que pertenece a un gigantesco antecesor de los cachalotes modernos.
El equipo internacional de paleontólogos que encontró los restos bautizó a la especie como "Leviathan melvillei", en honor del novelista estadounidense Herman Melville, autor de "Moby Dick", aunque ya se instaló la denominación de "ballena asesina peruana".
El paleontólogo peruano Rodolfo Salas, integrante del equipo que acaba de publicar su estudio en la revista científica Nature, explicó a EFE que se trata del mayor depredador marino que recorrió los océanos hace doce millones de años.
Entonces, ocupó la cúspide de la cadena alimenticia de los mares, como actualmente lo hace la orca.
Fue en noviembre de 2008, en el desierto de Ocucaje (un verdadero "parque jurásico" en la región sureña de Ica), cuando el paleontólogo holandés Klaas Post se topó con un cráneo de tres metros de largo que le llamó especialmente la atención.
Tenía unos dientes enormes, nunca antes vistos en esa zona rica en fósiles de animales marinos, que medían hasta 12 centímetros de diámetro y 36 centímetros de largo, y permitían a la criatura destrozar a sus presas, como hacen en la actualidad las ballenas asesinas, según el estudio.
Los investigadores se pusieron manos a la obra: había que rescatar el fósil, a punto de destruirse por culpa de la erosión frecuente en ese desierto, donde los vientos soplan muy fuerte y se llevan los restos por delante, detalló Salas.
Una vez armado el fósil, la investigación determinó que el cráneo y la mandíbula encontrados pertenecían a un cuerpo de entre 13,5 y 17,5 metros de un mamífero marino, emparentado con los cachalotes modernos, añadió.
A diferencia de estos últimos, que perdieron los dientes del maxilar, el paleontólogo peruano señaló que el cetáceo también tenía similitudes con la feroz orca, pues se alimentaba de numerosas especies de ballenas.
Fuente: EFE


