El presidente de la Corte Suprema de Santa Fe, Daniel Erbetta, quien ayer abrió formalmente el año judicial en los Tribunales rosarinos, se refirió a las salidas transitorias, en el marco de un paro de presos en Coronda que reclaman un freno a un decreto provincial que modifica la calificación de la conducta de los internos. También consideró la necesidad de impulsar una reforma integral del sistema judicial: “Hay que terminar con los jueces gerenciadores de pymes”, sostuvo.

En diálogo con Radiópolis en Radio 2, el titular del supremo tribunal consideró que las llamadas salidas transitorias debería estar en la agenda de discusión y que requieren ser evaluadas a fin de tener datos concretos de los niveles de incumplimiento. Tras remarcar que es una alternativa contemplada por la Constitución nacional en el marco de una progresiva reinserción del interno en la sociedad, consideró que atento a los casos concretos de personas que no regresan a sus penales y reinciden en delitos, es necesario “generar controles”.

Luego, rescató la iniciativa del ministro de Seguridad Maximiliano Pullaro quien el año pasado creó una brigada especial dependiente de la Policía de Investigaciones (PDI) destinada a recapturar a prófugos. Sin embargo, expresó que requiere una mejora en una capacidad operativa y logística.

Erbetta admitió “fortalezas y debilidades” del sistema judicial y apuntó a “un debate profundo y un compromiso interpoderes” para darle batalla. Apuntó a las garantías de los sectores “relegados” y a mejorar los tiempos. “Hay que repensar la estructura judicial que tiene un diseño del siglo 17, casi colonial. No podemos pensar en resolver problemas del siglo 21 con una diseño y una organización que hace culto al expediente, con una cultura de que baja y sube, de que falta un papel”, precisó.

“Existen problemas muy serios –continuó en conversación con los periodistas Roberto Caferra y Evelin Machain– pero la reforma del sistema procesal penal es un punto de referencia para pensar la modificación de otros poderes. Necesitamos jueces que no sean mitad jueces y mitad gerentes de pymes”, manifestó y explicó el concepto: “La estructura de un juzgado es feudal, el juez es como el dueño de un departamento de 80 metros cuadrados. Ellos dicen “Mi baño, mis empleados, mi computadora”. Tienen la responsabilidad de llevar la función jurisdiccional a través de pesados expedientes y gerenciar ese departamento, encargarse de las licencias de los empleados, solicitar tinta y papel para la computadora, requerir oficios”, detalló.

Para Erbetta “los jueces deberían sólo resolver y decidir” y no dedicar su tiempo en la administración del juzgado. “Si a cada juez le quito la función de gerenciamiento es como agregar un juez más”, planteó. “Los jueces no sabemos gerenciar, no tenemos entrenamiento para ese tipo de trabajo, qué mejor que tener gente especializada, administradores de empresa, ingenieros industriales y estructurar por otro lado”, agregó.

Cierre dominical y violencia de género

Erbetta confirmó que el máximo tribunal podrá expedirse en relación a la ley de descanso dominical en este trimestre. “Es un tema que preocupa sobre todo por la desigualdad que creó. Vamos a tratar de resolver con la mayor premura. El primero de los expedientes es de un super de Reconquista que seguro marcará la línea del resto de los 8 plateos”, indicó.

En cuanto a las capacitaciones a jueces en la temática de violencia de género, apuntó: “La cantidad de capacitaciones y curos desarrollados nos coloca a la vanguardia” y aseguró que en norte de la provincia han brindado herramientas de este tipo y la convocatoria ha sido del cien por ciento.