Un docente de una escuela media neoyorquina murió el domingo debido a la gripe A/H1N1, que ya causó otros cinco muertos en Estados Unidos, según informó el diario The New York Times, que se basa en fuentes oficiales.
Mitchell Wiener, la primera víctima de la nueva gripe en Nueva York, tenía 55 años y desde hace días estaba inconciente y asistido por un respirador artificial, según despacho de la agencia italiana Ansa.
Wiener trabajaba en una de las tres escuelas en el barrio de Queens que fueron cerradas la semana pasada.
De acuerdo con informes de una emisora de televisión local, citada por la agencia alemana DPA, el alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, dijo que posiblemente la nueva víctima ya sufría problemas de salud antes de contraer el virus.
En tanto la Oficina de Salud de Nueva York anunció que a partir de hoy se cerrarán preventivamente otras escuelas.
El Centro de Control y Prevención de Enfermedades indicó que en Estados Unidos hay 4714 casos confirmados o probables.
Unas 2.400 escuelas cerradas en Japón
La nueva gripe A se ha expandido con rapidez en Japón, donde la alta densidad de población y eventos deportivos escolares parecen haber propiciado el contagio de más de cien personas en sólo dos días, pese a las rigurosas medidas de precaución.
Este lunes eran 135 los enfermos confirmados en Japón, aunque ninguno de gravedad, y unos 2.400 colegios están cerrados en las dos provincias afectadas, Hyogo y Osaka, donde la gripe A podría haber llegado en su mayor parte por contagio humano.
El pasado viernes eran sólo cuatro casos los que se habían registrado en Japón de la gripe, antes llamada porcina, pero la expansión ha sido meteórica debido a que los primeros enfermos detectados formaban parte de una excursión escolar que viajó a Canadá.
La mayoría de los enfermos hoy confirmados son estudiantes de educación secundaria de las provincias de Hyogo y Osaka (centro de Japón) que no han viajado recientemente al extranjero, según la agencia local Kyodo.
Sus edades están comprendidas entre los 5 y los 60 años, aunque ahora se teme el efecto de la gripe A, para la que todavía no hay vacuna, en una población envejecida como la japonesa, donde el 21,5 por ciento de los habitantes tienen más de 65 años.
Otro de los riesgos es que la gripe A llegue a Tokio, donde la densidad de población es la mayor del mundo, de 5.847 habitantes por kilómetros cuadrado, muy por encima de los 340 habitantes de media japonesa, ya de por sí muy elevada.
El primer ministro nipón, Taro Aso, hizo hoy un llamamiento a la calma mientras que el Ministerio de Sanidad ha pedido que se eviten en lo posible las grandes concentraciones y organizar eventos masivos.
En la página que el Ministerio tiene en el portal YouTube, el ministro de Sanidad nipón, Yoichi Masuzoe, pide hoy a la población japonesa (127 millones) que se lave las manos, haga gárgaras y se ponga mascarillas.
Ello era hoy evidente en el torneo de sumo de Tokio, donde se rogaba a los espectadores que se lavasen las manos con desinfectante que les proveían allí, y en la bolsa de Osaka, donde se ha obligado a los empleados a usar mascarilla.
Desde el sábado, cuando se confirmó en Japón el primer caso de la nueva gripe en una persona que no viajó al extranjero, han ido ascendiendo con fuerza el número de contagios en este país, el más afectado en Asia.
Fuentes sanitarias señalaron a medios nipones que varios partidos de voleibol celebrados este sábado entre equipos de institutos del centro de Japón pudieron ayudar a extender la enfermedad entre los estudiantes.
Casi 2.400 escuelas públicas de primaria y secundaria o institutos de Hyogo y Osaka decidieron suspender este lunes las clases, lo que afecta ya a más de un millón de niños.
En Kobe, capital de la provincia de Hyogo, el contagio de una empleada veinteañera hizo hoy que los responsables de la sucursal del primer banco nipón, Bank of Tokyo-Mitsubishi, pidiesen al resto de los trabajadores que se abstengan de acudir al trabajo.
La mayoría de las empresas y bancos de las áreas más afectadas han pedido a sus trabajadores que acudan con mascarillas, cuyas ventas se han disparado en Japón desde que se conoció el primer caso de gripe A, el pasado 24 de abril.
En la bolsa de Tokio, la empresa fabricante de cubrebocas Toabo aumentó hoy su cotización un 44 por ciento, en línea con lo que está sucediendo estos días.
El profesor mexicano José Sarukhán, investigador del Instituto de Ecología de UNAM, aseguró hoy a Efe en Tokio que, ante el nuevo virus, "hay que seguir una serie de normas de cuidado, prevención, higiene social y aislamiento que este país conoce a la perfección".
La detección de los primeros casos en México, hace casi tres semanas, provocó que el Ministerio de Asuntos Exteriores instase a los japoneses a no viajar a ese país y pidiese a sus residentes allí que lo abandonasen, pero al final el virus ha llegado al país asiático procedente de Canadá y portado por nipones.
Fuente: Télam y EFE
Mitchell Wiener, la primera víctima de la nueva gripe en Nueva York, tenía 55 años y desde hace días estaba inconciente y asistido por un respirador artificial, según despacho de la agencia italiana Ansa.
Wiener trabajaba en una de las tres escuelas en el barrio de Queens que fueron cerradas la semana pasada.
De acuerdo con informes de una emisora de televisión local, citada por la agencia alemana DPA, el alcalde de Nueva York, Michael Bloomberg, dijo que posiblemente la nueva víctima ya sufría problemas de salud antes de contraer el virus.
En tanto la Oficina de Salud de Nueva York anunció que a partir de hoy se cerrarán preventivamente otras escuelas.
El Centro de Control y Prevención de Enfermedades indicó que en Estados Unidos hay 4714 casos confirmados o probables.
Unas 2.400 escuelas cerradas en Japón
La nueva gripe A se ha expandido con rapidez en Japón, donde la alta densidad de población y eventos deportivos escolares parecen haber propiciado el contagio de más de cien personas en sólo dos días, pese a las rigurosas medidas de precaución.
Este lunes eran 135 los enfermos confirmados en Japón, aunque ninguno de gravedad, y unos 2.400 colegios están cerrados en las dos provincias afectadas, Hyogo y Osaka, donde la gripe A podría haber llegado en su mayor parte por contagio humano.
El pasado viernes eran sólo cuatro casos los que se habían registrado en Japón de la gripe, antes llamada porcina, pero la expansión ha sido meteórica debido a que los primeros enfermos detectados formaban parte de una excursión escolar que viajó a Canadá.
La mayoría de los enfermos hoy confirmados son estudiantes de educación secundaria de las provincias de Hyogo y Osaka (centro de Japón) que no han viajado recientemente al extranjero, según la agencia local Kyodo.
Sus edades están comprendidas entre los 5 y los 60 años, aunque ahora se teme el efecto de la gripe A, para la que todavía no hay vacuna, en una población envejecida como la japonesa, donde el 21,5 por ciento de los habitantes tienen más de 65 años.
Otro de los riesgos es que la gripe A llegue a Tokio, donde la densidad de población es la mayor del mundo, de 5.847 habitantes por kilómetros cuadrado, muy por encima de los 340 habitantes de media japonesa, ya de por sí muy elevada.
El primer ministro nipón, Taro Aso, hizo hoy un llamamiento a la calma mientras que el Ministerio de Sanidad ha pedido que se eviten en lo posible las grandes concentraciones y organizar eventos masivos.
En la página que el Ministerio tiene en el portal YouTube, el ministro de Sanidad nipón, Yoichi Masuzoe, pide hoy a la población japonesa (127 millones) que se lave las manos, haga gárgaras y se ponga mascarillas.
Ello era hoy evidente en el torneo de sumo de Tokio, donde se rogaba a los espectadores que se lavasen las manos con desinfectante que les proveían allí, y en la bolsa de Osaka, donde se ha obligado a los empleados a usar mascarilla.
Desde el sábado, cuando se confirmó en Japón el primer caso de la nueva gripe en una persona que no viajó al extranjero, han ido ascendiendo con fuerza el número de contagios en este país, el más afectado en Asia.
Fuentes sanitarias señalaron a medios nipones que varios partidos de voleibol celebrados este sábado entre equipos de institutos del centro de Japón pudieron ayudar a extender la enfermedad entre los estudiantes.
Casi 2.400 escuelas públicas de primaria y secundaria o institutos de Hyogo y Osaka decidieron suspender este lunes las clases, lo que afecta ya a más de un millón de niños.
En Kobe, capital de la provincia de Hyogo, el contagio de una empleada veinteañera hizo hoy que los responsables de la sucursal del primer banco nipón, Bank of Tokyo-Mitsubishi, pidiesen al resto de los trabajadores que se abstengan de acudir al trabajo.
La mayoría de las empresas y bancos de las áreas más afectadas han pedido a sus trabajadores que acudan con mascarillas, cuyas ventas se han disparado en Japón desde que se conoció el primer caso de gripe A, el pasado 24 de abril.
En la bolsa de Tokio, la empresa fabricante de cubrebocas Toabo aumentó hoy su cotización un 44 por ciento, en línea con lo que está sucediendo estos días.
El profesor mexicano José Sarukhán, investigador del Instituto de Ecología de UNAM, aseguró hoy a Efe en Tokio que, ante el nuevo virus, "hay que seguir una serie de normas de cuidado, prevención, higiene social y aislamiento que este país conoce a la perfección".
La detección de los primeros casos en México, hace casi tres semanas, provocó que el Ministerio de Asuntos Exteriores instase a los japoneses a no viajar a ese país y pidiese a sus residentes allí que lo abandonasen, pero al final el virus ha llegado al país asiático procedente de Canadá y portado por nipones.
Fuente: Télam y EFE


