La situación causó graves inconvenientes a la compañía Menu Food, responsable del alimento, que contenía una toxina prohibida en EEUU que causó fallos renales a perros. Si bien los lotes contaminados se retiraron del mercado fue demasiado tarde para algunos animales.
El Departamento de Agricultura de Nueva York, junto con la Universidad de Veterinaria de Cornell, ha trabajado en los últimos días para determinar cuál es el componente de la comida para animales que estaban provocado fallos renales en perros y gatos.
Hasta el momento, se ha contabilizado la muerte de 16 mascotas en Estados Unidos, lo que ha provocado la retirada en los establecimientos de todo el país de los alimentos fabricados por esta empresa, que tiene su sede en Canadá.
La comida contenía un nivel de 40 partes por millón de aminopterina. Se trata de una toxina derivada del ácido fólico, puede causar cáncer y defectos de nacimiento a los seres humanos, en tanto que a los perros y gatos les origina daños en el riñón.
Las primeras denuncias se produjeron hace unos días, aunque no fue hasta el 16 de marzo cuando la empresa Menu Foods pidió la retirada de las tiendas de las latas y las bolsas de comida fabricadas en dos de sus plantas de Estados Unidos entre el 3 de diciembre y el 6 de marzo pasado.
En total, se han retirado unas 60 millones de latas y bolsas de esta empresas de comida, que se vende bajo un centenar de marcas distintas, dado que Menú Foods la vende a terceras empresas para que pongan sus propias etiquetas.