El concejal Eduardo Toniolli analizó este domingo el presente del país, el transporte urbano de pasajeros, la nocturnidad y su futuro político. Aseguró estar “preocupado” por las medidas económicas del actual gobierno nacional y cuestionó algunas quitas de subsidios en determinados sectores que hicieron que las consecuencias las pagaran los que menos tienen.

Toniolli, visitó los estudios de Radio 2 y en diálogo con el periodista Daniel De Paola (Todavía no es tarde) opinó que la actual situación del país es complicada y se mostró “preocupado” al respecto.

“En Rosario hay 760 locales cerrados en el último semestre y sobre todo en la mayoría del centro. Este cimbronazo en materia política macroeconómica impactan en Rosario que siempre estuvo muy atada a los ciclos nacionales”, expresó.

Y agregó: “Hoy estamos en una situación compleja. No es un gobierno que se esté equivocando en lo que está haciendo. Sino que producto de las políticas que lleva adelante y lo que quiere hacer, encuentra estos resultados”.

Hizo hincapié en que “si abren indiscriminadamente las importaciones, se sacan los impuestos a sectores de la economía que son los que más pueden aportar; y después intentan buscar esos recursos a través de la quita de subsidios a energía y al transporte, encuentran este tipo de situaciones”.

“No es casualidad que estos movimientos se den en las carteras de Energía y Producción”, haciendo referencia la salida de los ministros de Energía, Juan José Aranguren, y de Producción, Francisco Cabrera, que serán reemplazados por Javier Iguacel y Dante Sica, respectivamente.

En cuanto al tema transporte, Toniolli es un entendido en el tema y siempre ha buscado la manera de encontrar el beneficio para quienes son los usuarios del sistema de transporte urbanos.

“Los usuarios son los trabajadores y dentro de este grupo mayoritariamente los trabajadores informales y los estudiantes. La Nación ha ido retirando subsidios. Esto genera un perjuicio. El Frente Progresista lejos de convocar a todos los concejales, la Intendenta (Mónica Fein) no lo hizo. El Frente y el Pro a veces se sacan chispas mediática por una soberana pavada mientras tenemos colectivos que no ingresan a la noche en determinados barrios y la frecuencia va de mal en peor. En los últimos dos años se perdió un 15 por ciento de usuarios del sistema de transporte público en Rosario”, explicó.

“En 2017 se cortaron 20 millones de boletos menos que en el 2015. Esto hace que estemos hablando de una curva descendente. ¿Cómo recuperamos a esos usuarios? Este municipio quiere instalar la idea de desalentar el uso de móvil particular. No conozco otra manera para hacerlo que no sea mejorar el transporte público”, explicó Toniolli.

Uno de los temas que también fue abordado por el edil fue el de la nocturnidad y el horario del cierre de los boliches. “Rosario tiene que segmentar en función de los decibeles porque tiene que ver con el entorno. La discusión pasa por cómo cuidamos a los pibes y a las pibas, cómo hacemos que los encargados de seguridad no sean los enemigos, sino que los protejan y cómo debe ser para los que lo encaran desde el lado empresarial, que puedan invertir para insonorizar y cuidar la relación con el entorno y que sea algo redituable. Lo peor que podemos hacer es matar la noche rosarina, que se pretende una ciudad turística”.

Esta semana hubo una polémica por el tema del ploteo de una de las líneas del Transporte con la cara del “Che” Guevara.

Al respecto Toniolli manifestó: “Hay tantos temas para discutir y mejorar del transporte público que me parece algo anecdótico. Es una figura que trasciende lo ideológico, referencia a la ciudad en el mundo y hace que vengan muchos turistas de distintos lugares del mundo a conocer la casa natal. Hay que pensar en esas cosas”.

La problemática que se desata en la Terminal de Ómnibus con los taxistas fue otro de los ítems que abordó.

“Hay que poner un inspector las 24 horas con turnos de 8 horas y rotativos. Las paradas no tienen dueños en Rosario”.

Y reflejó que esas cosas se pueden regular y en la actualidad se da porque no hay trabajo. “Antes el sol salía para todos. La crisis ajusta la cantidad de viajes. Antes se veían filas de personas esperando taxis, hoy hay colas de taxis esperando personas”.

Por último, fue consultado sobre su futuro político y si bien aclaró que “no es tiempo de andar discutiendo” al respecto, confesó: “¿A quién no le gustaría ser intendente de esta ciudad hermosa que tantos problemas tiene por resolver? Me encantaría alguna vez serlo”.