Nicolás Russo, presidente de Lanús, manifestó estar "destruido" por los episodios de violencia que se registraron este sábado entre barras granates antes del comienzo del partido con All Boys, enfrentamiento que dejó un muerto como saldo provisorio

"Estoy destruido. Uno viene a ver un partido de fútbol con familiares y amigos. Y nunca antes había pasado ésto en Lanús", reflejó el directivo de la entidad sureña, completamente abatido, en zona de vestuarios. "No conozco qué pudo haber pasado. Sé que la Policía actuó rápidamente", agregó el dirigente.

Minutos antes del comienzo del partido, al menos dos fracciones de la barra de Lanús se enfrentaron a los balazos en las inmediaciones de la puerta principal de uno de los accesos a la platea local, en Arias y Guidi. El saldo de la refriega entregó un barra asesinado con un balazo en el pecho (murió en el Hospital Eva Perón), cinco heridos (dos de ellos, en grave estado) y nueve detenidos.

"Además se secuestraron dos autos y se encontraron tres armas de fuego", amplió Russo, según lo que le narraron fuentes policiales provinciales.

"Los estamentos del fútbol y de la política tenemos que actuar para terminar con todo ésto (violencia) de una buena vez", exigió el dirigente. "Lanús trabajará para esclarecer el episodio hasta las últimas consecuencias", prometió Russo.

Fuente: Télam