Tras haberse reunido con el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, desde la Cámara Argentina de Fabricantes de Motos (Cafam) se mostraron esperanzados de que el gobierno flexibilice el peso del nuevo impuesto sobre vehículos de alta gama en algunos segmentos.
Lino Estefanuto, de la Cafam, señaló que actualmente entran en la medida muchas motos de tipo utilitarias que no deberían ser consideradas de lujo. Advirtió, además sobre la rápida devaluación del dólar oficial que ensancharía el parque automotor sujeto a impuesto y adelantó que en un año la medida afectará a la industria nacional.
En diálogo con A Diario, el programa que conduce Alberto Lotuf por Radio 2, Estefanuto se refirió al impuesto sobre los bienes de lujo que la semana pasada aprobó el Senado nacional. Al igual que en el caso de los autos, para el referente de la Cafam, debido a la falta de una actualización automática por la inflación, cada vez más motos deberán pagar el tributo y las terminales nacionales se verán resentidas.
“Lo que hoy no entra, entra en seis meses. En un año, entrarán la mitad de las motos que se fabrican en el país”, apuntó el dirigente. De acuerdo a lo sancionado en la Cámara alta, las motos a partir de los 22 mil pesos deberán pagar el tributo, lo que para la Cafam es injusto ya que los rodados de ese precio no son considerados de lujo.
Por ello, y para que la medida sea realmente progresiva, apuntaron a modificar mínimos y alícuotas.
“Las embarcaciones, por ejemplo, comienza a pagar a partir de los 100 mil pesos, pero una moto de agua vale menos que eso y queda claro que se trata de un bien de lujo”, llamó la atención Estefanuto, quien sin embargo se mostró optimista de que el Ejecutivo realice cambios en los montos y porcentajes durante la reglamentación de la ley.