Rubén Lescano
Al maestro con cariño.
Para los amantes del arte, este parece ser un mal año. Primero fue Fontanarrosa y ahora otro maestro: Rubén de la Colina.
Rubén fue un pintor destacado, con obras expuestas en muchos países, reflejando en sus oleos el color y la luminosidad del noroeste del país, sus personajes y capillas, con xilografias de profundo fervor religioso, sus prólogos y criticas de arte, comentarios en diario La Tribuna, maestro de artistas consagrados, docente de la UNR, director del Castagnino y, sobre todo, un gran amigo (como dijo en una nota: "Mi vida ha sido un banquete de amor y amistad").
Quienes compartimos tus charlas o vimos tu obra nunca te olvidaremos.
Hacía unos dias que estaba internado en terapia intensiva en el sanatorio Británico por un accidente cerebro vascular, que se fue complicando. Sus ochenta y algo de años no soportaron.