El represor Miguel Etchecolatz fue condenado esta noche a reclusión perpetua. La sentencia del Tribunal Oral Federal N° 1 de La Plata es por crímenes, privaciones ilegales de la libertad y tormentos ocurridos durante la última dictadura militar. El fallo es el resultado del segundo juicio oral y público tras la derogación de las leyes de Punto Final y Obediencia Debida. Además, el fallo incorpora la figura penal de "genocidio".

Así lo hizo saber el presidente del Tribunal, Carlos Rozanski, durante la lectura del veredicto, que por primera vez introduce la figura del genocidio para los delitos ocurridos durante la última dictadura militar. El fragmento clave señala "todos estos, delitos de lesa humanidad cometidos en el marco del genocidio que tuvo lugar en la República Argentina entre los años 1976 y 1983".

En la lectura del fallo hubo incidentes, el ex director de Investigaciones de la Policía Bonaerense y sus abogados fueron agredidos, y fue suspendida unos minutos. Después hubo mucha emoción. El represor vuelve definitivamente a la cárcel.

El fallo

El Tribunal integrado por los jueces Carlos Rozanski, Horacio Insaurralde y Norberto Lorenzo, aplicó por primera vez la figura de genocidio para esta clase de delitos.

Etchecolatz fue condenado a reclusión perpetua por los homicidios calificados de Diana Teruggi de Mariani y por la privación ilegal, tormentos y homicidio calificado de Ambrosio De Marco, Patrcia Dell`Orto, Elena Arce, Nora Formiga y Margarita Delgado.
 
Además, el Tribunal lo condenó por la privación ilegítima de la libertad y aplicación de tormentos de Jorge Julio López y Nilda Eloy.
 
La lectura del veredicto, debió suspenderse unos minutos, luego que integrantes de organizaciones de derechos humanos arrojaron bombas de pintura contra el represor, al conocer la pena.

Personal policial sacó de inmediato de la sala de audiencias al ex comisario, quien en un salón contigüo insultó al presidente del Tribunal, según revelaron a Télam fuentes judiciales.

La reacción del público ocurrió cuando el represor besó el rosario que tuvo entre sus manos en las tres audiencias en las que estuvo presente y miró al cielo, tras escuchar su condena a reclusión perpetua.
 
El juicio contra Etchecolatz, mano derecha del ex jefe de la Policía Bonaerense, Ramón Camps, fue el primero en sustanciarse tras la anulación por el Congreso de la Nación de las denominadas leyes del Perdón.
 
A lo largo de los tres meses que duraron las audiencias, el ex comisario estuvo presente sólo en la primera, cuando se le leyó la acusación, y en las dos últimas, en las que se pronunciaron los alegatos y el veredicto.

Últimas palabras

El ex comisario se autodefinió esta tarde -al hacer uso de la palabra ante el Tribunal que lo juzga- como "un prisionero de guerra y detenido político" y aseguró que antes de conocerse la sentencia que sabe que lo van a condenar.

"Este juicio para mí ha sido instrumentado como un rompecabezas para niños bobos o bien para grandes avivados porque he participado de una guerra que ganamos con las armas pero que políticamente vamos perdiendo", sostuvo el ex policía al hacer uso del derecho de emitir sus últimas palabras antes de conocerse la sentencia.

Etchecolatz también dijo, dirigiéndose a los integrantes del Tribunal, que "no es este tribunal el que me condena, son ustedes los que me condenan".