El próximo lunes, la presidenta de la Nación, Cristina Fernández de Kirchner, recibirá en la residencia de Olivos a representantes del Centro de la Industria Lechera (CIL) y dirigentes del sector tambero de las provincias de Santa Fe, Córdoba y La Pampa para firmar el acuerdo mediante el cual se establecerá el pago mínimo de 1 peso por litro de leche para el productor.
Mediante el acuerdo, que tendrá vigencia hasta el 31 de diciembre próximo, el Estado Nacional se compromete a adquirir parte del excesivo stock de leche en polvo y quesos presente en el mercado local.
“Este acuerdo es lo mejor para todos, dentro de lo que se puede pretender en este contexto actual –afirmó a Rosario3.com, Ricardo Garnero, dirigente de la Mesa de Productores Lecheros de Santa Fe– y sugirió que ya que todas las industrias están en condiciones de afrontar ese valor, hay que encarar lo que viene con las mejores de expectativas de mejorar la situación presente.
A diferencia de lo expresado por el dirigente santafesino, los representantes de los productores lecheros de las provincias de Buenos Aires y Entre Ríos, además de los dueños de las Pymes lácteas, sostienen que en la situación de crisis actual no están en condiciones de pagar más de 0,85 centavos por litro.
“En caso de que este acuerdo resulte ratificado, podrían cerrarse muchas fuentes laborales de familias que dependen de la pequeña industria lechera, en especial en el interior de las provincias”, afirmó Javier Baudino, presidente de la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas (Apymel) de la provincia de Córdoba.
El presidente de la Unión General de Tamberos, Emiliano Amondanraín, aclaró, por su parte, que los productores que firmarán el acuerdo son “aliados del gobierno nacional en la destrucción de la lechería argentina. No podemos creer como firman un valor que nunca se cumplió cuando estuvo vigente y mucho menos sin reglas claras y sin consensuar con el resto de la cadena”, sostuvo Amondanraín.
En relación con el acuerdo firmado el 2 de julio pasado (aún vigente), el dirigente tambero recordó que “ese acuerdo jamás se cumplió y hasta ahora algunas industrias están esperando que les llegue la compensación del Estado. Es una vergüenza saber que hay productores que avalan esta lapidación”.
En tanto, la Comisión de Enlace Agropecuaria, integrada por las cuatro entidades del campo con representación nacional, expresó que “desconoce” los “contenidos y alcances” de lo que sería un nuevo convenio para la lechería e indicó que “toda medida para sanear la situación del sector debe tomarse en concertación con todos los integrantes de la cadena y el gobierno nacional”.
Esa posición se dio a conocer por medio de un comunicado de prensa firmado por la Sociedad Rural Argentina (SRA), la Federación Agraria Argentina (FAA), Confederaciones Rurales Argentina (CRA) y Coninagro, que se difundió tras un encuentro que mantuvieron con la Mesa Nacional de Productores de Leche.
Las entidades del campo sostienen que “toda medida lanzada para sanear la situación del sector debe tomarse en concertación con todos los integrantes de la cadena (producción, industria y comercialización) y el gobierno nacional”.
Mediante el acuerdo, que tendrá vigencia hasta el 31 de diciembre próximo, el Estado Nacional se compromete a adquirir parte del excesivo stock de leche en polvo y quesos presente en el mercado local.
“Este acuerdo es lo mejor para todos, dentro de lo que se puede pretender en este contexto actual –afirmó a Rosario3.com, Ricardo Garnero, dirigente de la Mesa de Productores Lecheros de Santa Fe– y sugirió que ya que todas las industrias están en condiciones de afrontar ese valor, hay que encarar lo que viene con las mejores de expectativas de mejorar la situación presente.
A diferencia de lo expresado por el dirigente santafesino, los representantes de los productores lecheros de las provincias de Buenos Aires y Entre Ríos, además de los dueños de las Pymes lácteas, sostienen que en la situación de crisis actual no están en condiciones de pagar más de 0,85 centavos por litro.
“En caso de que este acuerdo resulte ratificado, podrían cerrarse muchas fuentes laborales de familias que dependen de la pequeña industria lechera, en especial en el interior de las provincias”, afirmó Javier Baudino, presidente de la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas (Apymel) de la provincia de Córdoba.
El presidente de la Unión General de Tamberos, Emiliano Amondanraín, aclaró, por su parte, que los productores que firmarán el acuerdo son “aliados del gobierno nacional en la destrucción de la lechería argentina. No podemos creer como firman un valor que nunca se cumplió cuando estuvo vigente y mucho menos sin reglas claras y sin consensuar con el resto de la cadena”, sostuvo Amondanraín.
En relación con el acuerdo firmado el 2 de julio pasado (aún vigente), el dirigente tambero recordó que “ese acuerdo jamás se cumplió y hasta ahora algunas industrias están esperando que les llegue la compensación del Estado. Es una vergüenza saber que hay productores que avalan esta lapidación”.
En tanto, la Comisión de Enlace Agropecuaria, integrada por las cuatro entidades del campo con representación nacional, expresó que “desconoce” los “contenidos y alcances” de lo que sería un nuevo convenio para la lechería e indicó que “toda medida para sanear la situación del sector debe tomarse en concertación con todos los integrantes de la cadena y el gobierno nacional”.
Esa posición se dio a conocer por medio de un comunicado de prensa firmado por la Sociedad Rural Argentina (SRA), la Federación Agraria Argentina (FAA), Confederaciones Rurales Argentina (CRA) y Coninagro, que se difundió tras un encuentro que mantuvieron con la Mesa Nacional de Productores de Leche.
Las entidades del campo sostienen que “toda medida lanzada para sanear la situación del sector debe tomarse en concertación con todos los integrantes de la cadena (producción, industria y comercialización) y el gobierno nacional”.


