El ex ministro de Trabajo Alberto Flamarique solicitó la postergación de la audiencia en la que debía prestar declaración indagatoria esta mañana en la causa en la que se investiga el pago de sobornos en el Senado para la aprobación de la ley de reforma laboral, en abril de 2000. Así lo confirmaron fuentes tribunalicias que señalaron que la petición la hizo el defensor oficial Rodolfo Catinelli -quien asiste técnicamente al ex ministro de la Alianza- para poder "estudiar mejor" el voluminoso expediente. En la causa ya están procesados el ex jefe de la Side Fernando de Santibañes, los ex senadores justicialistas Emilio Cantarero, Remo Costanzo y Ricardo Branda y el "arrepentido" Mario Pontaquarto, quien reveló el caso. El ex presidente Fernando de la Rúa no está en esa situación pero Rafecas aún debe decidir que hace con él. El ex mandatario compareció el lunes durante diez horas: por primera vez prestó declaración indagatoria, donde negó haber utilizado fondos de la Side para sobornar a un grupo de senadores que en abril de 2000 votó en favor de la ley de Reforma Laboral. De la Rúa compareció el pasado lunes durante diez horas: por primera vez prestó declaración indagatoria donde negó haber utilizado fondos de la Side para sobornar a un grupo de senadores que en abril de 2000 votó en favor de la ley de Reforma Laboral. En la causa ya están procesados Flamarique, el ex jefe de la Side Fernando de Santibañes, los ex senadores justicialistas Emilio Cantarero, Remo Costanzo y Ricardo Branda y el "arrepentido" Mario Pontaquarto, quien reveló el caso. Pero Rafecas volvió a citarlos a todos para poder interrogarlos sobre la reconstrucción cronometrada del trayecto que Pontaquarto dijo haber hecho la noche del 26 de abril de 2000, desde el Senado hasta la SIDE, para buscar el dinero y de allí al domicilio de Cantarero, en avenida Callao y Posadas. Por el tiempo transcurrido, la causa podría prescribir. Por ello el titular de la Oficina Anticorrupción -querellante en el proceso-, Abel Fleitas Ortiz de Rozas, admitió que "hay un tiempo escaso y limitado para producir las pruebas porque se corre el riesgo de que haya prescripción de la acción". No obstante, resaltó el impulso del expediente de la mano de Rafecas y aseguró que "en la Oficina Anticorrupción nos hemos fijado un objetivo con mucha energía, que es llevar las causas a juicio, salir de la instrucción que se eterniza y que además debería ser una etapa inicial, pero parece que se convierte en la etapa principal del proceso". Ortiz de Rozas hizo estas declaraciones en el contexto de la Primera Jornada sobre Organismos de Control frente al Crimen Económico y la Corrupción, en donde disertó sobre Control de la corrupción en el sector público.