Entre Ríos aceptó convocar a Prefectura y Gendarmería para que ayuden a controlar los incendios en las islas, tal como pedía Santa Fe, y además las policías de ambas provincias buscarán coordinar acciones en ese sentido. Así se acordó en la reunión que los gobernador Jorge Busti y Jorge Obeid mantuvieron en Paraná, justamente para encontrarle una solución a esta problemática. Sin embargo, para el intendente Miguel Lifschitz, aunque el encuentro fue “positivo” se trata de “una medida coyuntural” y se necesita todavía “una solución de fondo”, motivo por el cual volvió a reclamar a través de Radio 2 la intervención del gobierno nacional en el tema.

Durante una conferencia de prensa ofrecida al término del encuentro, Obeid calificó a la reunión con su par entrerriano de "fructifera" y reveló que se elaboraron dos estrategias, una de mediano y largo plazo y otra, de aplicación inmediata. Explicó que la medida de mediano y largo plazo tendrá que ver con la búsqueda de legislación por parte de ambas provincias y la Nación para proteger la zona y dar un uso racional al suelo de las islas, "en función de la garantía de mantenimiento del sistema ecológico en la región". "En el corto plazo, se buscará soluciones para ejercer un fuerte control en el territorio afectado mediante la presencia de efectivos policiales de Entre Ríos y Santa Fe, de la Prefectura, Gendarmería, de equipos de la Secretaría de Medio Ambiente de la Nación y de los cuerpos de Bomberos Voluntarios", añadió.

Obeid insistió en que "tenemos que hacer una tarea preventiva de control del territorio y sancionar a los que producen las quemas, además de contar con los elementos para dar una rápida respuesta en caso de nuevos incendios". "El problema de la quema es grave para Rosario, que en las últimas semanas ha estado bajo una nube de humo, hollín y gases", añadió el gobernador, pero descartó la necesidad de tener que recurrir a la Justicia para resolver los problemas de las quemas de pastizales.

Por su parte, Busti reconoció que en la zona se islas "se vive una situación de emergencia a causa de una bajante histórica del río Paraná y de una sequía que no se daba hacía mucho tiempo". El mandatario anticipó que esta tarde se reunirán en Victoria los jefes de las policías de ambas provincias "para diseñar una acción conjunta con las fuerzas nacionales y los cuerpos de bomberos en el control del fuego".

"Nos comunicamos con el ministro del Interior, Aníbal Fernández y nos ha dicho que afectará para la tarea de control, en un área de más 320.000 hectáreas, a efectivos de la Prefectura y la Gendarmería", reveló. Busti dijo que también habló con la secretaria de Medio Ambiente, Romina Picolotti, quien le prometió que esta tarde le hará llegar a ambos gobernadores el plan de acción para la región de la Brigada del Fuego, con sus aviones hidrantes.

Otra fue la postura de Lifschitz, quien si bien celebró que finalmente ambos gobernadores se reunieran para tratar un tema tan importante interpretó que lo que sucede en las islas “tiene la misma entidad del tema del riachuelo en Buenos Aires, que ha merecido la intervención de la Suprema Corte, el gobierno nacional y el Congreso”.

El intendente interpretó que el tema del humo en las islas “merecía que las máximas autoridades provinciales tomaran cartas en el asunto”, pero evaluó que la propuesta “parece ser una medida coyuntural que alivie la situación, pero no es una solución de fondo en la medida en que no se aborde el problema integral del ecosistema y medioambiente del río Paraná”. Luego insistió: “No hay que pensar punto de vista localista, desde Rosario o Victoria, hablamos de Argentina, del planeta”, graficó.

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Obeid explicó el acuerdo en Radio 2.