El caso de Gustavo Moreno, el paciente hiperobeso que tuvo serias dificultades para conseguir una plaza en el Hospital Centenario y Provincial debido a su peso, continúa dando tela para cortar. Es que, según manifestó el director de Gestión Médico Social del Programa Federal de Salud y Casos Sociales, Jorge Prieto, en contacto con Radio 2, el Programa de Obesidad Integral en Santa Fe (Probisfé) recién se puso en funcionamiento en junio de este año y en Rosario sólo hay dos camillas y una cama adaptadas para personas con sobrepeso.
Mientras tanto, los familiares de Moreno decidieron llevar lo sucedido a la justicia y presentar un recurso de amparo que obligue al Estado a brindarle atención. Sin embargo, en contacto con el programa Diez Puntos de Radio 2, Prieto aseguró que al paciente se le ofreció atención domiciliara o bien, internación en el Hospital Centenario pero él lo rechazó, insistiendo con permanecer en el Hospital Provincial.
“A través del Programa de Obesidad Integral en Santa Fe se atiende la llamada obesidad mórbida en los hospitales Centenario y Provincial de Rosario y el Cullen e Iturraspe de Santa Fe. En Rosario hay dos camas y una camilla adaptadas para personas hiperobesas” lanzó y justificó: “Entendemos que es una patología que no es para hospitalizar sino para un tratamiento y ofrecemos la internación a domicilio”.
El reducido número de plazas disponibles es, de acuerdo al director de Gestión Médico Social del Programa Federal de Salud y Casos Sociales, consecuencia a la temprana conformación del Probisfé, a mitad de este año. “Antes los pacientes con obesidad mórbida no eran tratados como tales”, argumentó.
En cuanto al caso de Gustavo Moreno, Prieto aseguró que “se le ofreció atención domiciliaria o bien que se interne en el hospital Centenario pero él no quería y prefería atenderse en el Hospital Provincial”, indicó y manifestó que esa información se la había brindado la propia directora del Hospital Provincial, Teresita Ghío.
Gustavo Moreno, tiene 41 años y es hiperobeso. Este viernes, tras varios intentos logró ser internado en el hospital Provincial. Según señalaron sus familiares había permanecido internado en el Hospital de Emergencia Clemente Álvarez pero debió ser llevado al Hospital Centenario donde, aseguraron, se le negó la atención debido a la ausencia de camas capaces de soportar su excesivo peso.
Mientras tanto, los familiares de Moreno decidieron llevar lo sucedido a la justicia y presentar un recurso de amparo que obligue al Estado a brindarle atención. Sin embargo, en contacto con el programa Diez Puntos de Radio 2, Prieto aseguró que al paciente se le ofreció atención domiciliara o bien, internación en el Hospital Centenario pero él lo rechazó, insistiendo con permanecer en el Hospital Provincial.
“A través del Programa de Obesidad Integral en Santa Fe se atiende la llamada obesidad mórbida en los hospitales Centenario y Provincial de Rosario y el Cullen e Iturraspe de Santa Fe. En Rosario hay dos camas y una camilla adaptadas para personas hiperobesas” lanzó y justificó: “Entendemos que es una patología que no es para hospitalizar sino para un tratamiento y ofrecemos la internación a domicilio”.
El reducido número de plazas disponibles es, de acuerdo al director de Gestión Médico Social del Programa Federal de Salud y Casos Sociales, consecuencia a la temprana conformación del Probisfé, a mitad de este año. “Antes los pacientes con obesidad mórbida no eran tratados como tales”, argumentó.
En cuanto al caso de Gustavo Moreno, Prieto aseguró que “se le ofreció atención domiciliaria o bien que se interne en el hospital Centenario pero él no quería y prefería atenderse en el Hospital Provincial”, indicó y manifestó que esa información se la había brindado la propia directora del Hospital Provincial, Teresita Ghío.
Gustavo Moreno, tiene 41 años y es hiperobeso. Este viernes, tras varios intentos logró ser internado en el hospital Provincial. Según señalaron sus familiares había permanecido internado en el Hospital de Emergencia Clemente Álvarez pero debió ser llevado al Hospital Centenario donde, aseguraron, se le negó la atención debido a la ausencia de camas capaces de soportar su excesivo peso.