Un joven denunció que a nueve días de haberse comprado una moto se la robaron. Hasta ahí, el caso no llama demasiado la atención y se incluye en las gruesas estadísticas de sustracción de rodados en la ciudad. El tema es que, aunque la policía asegura que se mantiene el pedido de captura por el vehículo, la víctima denuncia una supuesta irregularidad: sostiene que la moto fue encontrada, pero luego ocultada. E involucra en la maniobra a la fuerza policial.

El denunciante es un joven de 26 años, José María Ángel Medina, quien dice haber comprado el 28 de octubre de este año, una moto negra marca Motomel Eco, de 70 centímetros cúbicos, modelo 2006, Nº de motor 6054269 y Nº de cuadro 6B054269.

Según el texto de la denuncia por él presentada en la seccional 1ª de Policía el 6 de noviembre, ese mismo día dejó estacionada su moto en la vereda de calle Ayacucho 1648 con cadena y candado de seguridad, pero cuando regresó a buscarla, había desaparecido.

De acuerdo a sus explicaciones, si bien no poseía patente porque la misma estaba en trámite, el rodado sustraído cuenta con calcos originales pintados con esmalte en aerosol color negro, hechos por él mismo, que permiten identificarlo.

Hasta allí, la denuncia podría ser una más de las tantas que a diario se reciben por robo de motos en Rosario, pero la situación se complica a partir de una información que –off de record– llega al damnificado, según la cual, tanto su moto como otras 5 que tenían idéntico pedido de captura fueron halladas por la policía motorizada, según consta en el libro de ingresos del Comando Radioeléctrico, con fecha 10 de noviembre, folio 59, inciso 2º.

Aún así, y por razones poco claras para él hasta el momento, en la seccional 1ª de policía le ratifican que su vehículo sigue con pedido de captura y no hay noticias de su paradero.

Esto último fue denunciado por Medina en la División Judicial de la Unidad Regional II el 18 de noviembre donde caratularon el hecho como Malversación de caudales Públicos imputado al personal policial, a raíz de lo cual se dio intervención al Juzgado de Instrucción de la 3ª. Nominación de Rosario, que investiga lo ocurrido.