La infancia es una construcción social, histórica y política. Su cultura es atravesada por aspectos psicológicos, biológicos y pedagógicos, tanto como por el consumo de tecnologías, indumentaria, alimentación, entre otros bienes simbólicos. Estos factores vuelven necesaria la actualización de la mirada respecto de la niñez como base del desarrollo del pensamiento. Por este motivo, investigadores indagan en la construcción de significados respecto del concepto de infancia en la actualidad.

Una investigación, que se realiza en centros urbanos de clase media de la región de Villa María, se enmarca en variables socio-culturales, psicológicas y pedagógicas y se sostiene en una definición de la infancia “en plural”, ya que los investigadores consideran que “no es lo mismo el niño que tiene que desarrollarse en un contexto marginal que aquel que crece en una clase media-alta”.

La primera etapa, desarrollada durante 2011, confirma en parte la hipótesis inicial que plantea que “las representaciones de criterios educativos que tienen los adultos, maestros y familia se encuentran en crisis frente a las nuevas modalidades culturales por las cuales atraviesa la infancia, lo que lleva a pensar que los dispositivos existentes no son eficaces para abordarlas”.

Mercedes Civarolo, directora de la investigación, explica a Argentina Investiga que las primeras indagaciones sobre cuál es la representación del concepto de la infancia en la actualidad se hicieron a docentes, gabinetistas y directivos de instituciones educativas; y éstas continuarán con la exploración de otros grupos de adultos, como los padres, con el objetivo de realizar un estudio comparativo y determinar el grado de similitud o diferencias con las respuestas obtenidas entre los educadores.

“De existir una diferencia sería dificultoso a la hora de llevar adelante la educación por parte de la familia, como socialización primaria, o por parte de los educadores, como socialización secundaria. ¿Cómo es posible que podamos educar juntos si se entiende de distinta manera la infancia? Hablamos de una brecha entre lo que piensa la familia y lo que piensan los educadores”, describe la especialista.

Los investigadores reconocen que la voz que menos se escucha es la de la infancia. Por esta causa, y en una tercera instancia, trabajarán con niños de 5 a 12 años para ver cómo piensan ellos y cruzar los datos con los grupos de adultos.

El concepto de infancia sufrió cambios y los investigadores buscan entender cuáles fueron y de qué manera pueden entenderlo los adultos. Consultada acerca de la visión que tienen los educadores, Civarolo aclara que no es unívoca y que se basa en “una representación idealizada, ingenua y romántica de la infancia; se los encuentra un tanto confundidos en torno a lo que está ocurriendo”.

A raíz de ello, el equipo analiza las derivaciones didácticas en el aula. “Los datos muestran que los educadores hablan muy bien del niño de antes y destacan aspectos negativos en el niño de hoy. Por eso decimos que hay una visión idealizada de aquel niño donde había certezas respecto de la infancia. La opinión está dividida entre los que piensan que la infancia está en crisis y quienes creen que no, lo paradójico es que para sostener ese pensamiento el argumento es el mismo: La sociedad adulta está en crisis y eso repercute en los niños”, profundiza.

Fuente: Universidad Nacional de Villa María