El gobierno iraní afirmó que no teme la posible imposición de sanciones internacionales a Irán, horas antes del vencimiento del plazo dado por el Consejo de Seguridad de la ONU a este país para que suspenda el enriquecimiento de uranio.

El portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores iraní, Hamid Reza Asefi, insistió en que las actividades nucleares iraníes son pacíficas y que posibles "embargos reforzarán aún más a Irán", según la televisión estatal.

Asefi afirmó que su país "está preparado para todas las posibilidades, y que el pueblo iraní no acepta el lenguaje de las amenazas y de la fuerza".

También consideró que "los estados europeos no están de acuerdo respecto al caso nuclear" iraní.

El Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) tiene previsto enviar a todos los países miembro y al Consejo de Seguridad de la ONU el último informe técnico sobre el programa nuclear iraní.

Estados Unidos ha anunciado que desea impulsar sanciones contra Irán.

Los líderes iraníes han insistido en que no abandonarán sus actividades nucleares, que aseguran que tienen fines pacíficos, pero reiteraron que están dispuesto a continuar el diálogo con la comunidad internacional.