A una semana de los primeros ataques, el conflicto entre israelíes y libaneses parece lejos de resolverse. Mientras la diplomacia hace sus intentos pero no logra avanzar, aviones israelíes bombardearon hoy el sur de Líbano y dejaron 12 muertos. La situación en Medio Oriente se volvió aún más crítica luego de que el ejército israelí se negase a descartar una masiva invasión terrestre al sur de Líbano, a seis años de finalizada la ocupación de esa zona.

 

"A esta altura no pensamos que tengamos que movilizar masivas fuerzas terrestres hacia Líbano pero si tenemos que hacerlo, lo haremos. No lo descartamos", aseguró Moshe Kaplinsky, vicejefe del Ejército de Israel, a Radio Israel.

 

Siete civiles, todos de la misma familia y algunos de ellos niños, fallecieron y cuatros sufrieron heridas durante un ataque aéreo cuando un proyectil impactó su hogar poco después de medianoche en un poblado libanés fronterizo. La aviación israelí también atacó un suburbio al sur de Beirut, algunos objetivos militares, y otras dos ciudades libanesas. El ejército libanés indicó que en los ataques de esta madrugada murieron cinco soldados.

 

Por su parte, Hezbolá volvió, por tercer día consecutivo, a lanzar cohetes contra la ciudad israelí de Haifa. Esta vez, sin causar víctimas, según informaron las autoridades. En uno de los ataques a la norteña ciudad israelí de Nahariya murió una persona, informaron fuentes médicas. En total, Hezbolá disparó 1500 misiles y cohetes contra Israel desde el comienzo de la crisis.