El judoca argentino Emmanuel Lucenti ilusionó al principio y se quedó al final, aunque igual redondeó una muy buena actuación y se aseguró un diploma en la categoría de hasta 81 kilogramos, en el marco de los Juegos Olímpicos Londres 2012.

El judoca nacido en Tucumán hace 27 años comenzó su actuación en el estadio ExCel de la capital británica con un triunfo por ipon sobre Fetra Ratzimisiva, de Madagascar, y luego generó ilusión con otra victoria por la misma vía (similar al nocaut en el boxeo), esta vez ante el francés Alain Schmitt.

Sin embargo, una molestia en el aductor derecho y una marcada superioridad de su rival generó la primera derrota de Lucenti, frente al coreano Jae Bum Kim, actual campeón del mundo en la categoría de hasta 81 kilogramos, y luego cerró con otra derrota, frente al canadiense Antoine Valois Fortier.

"Me quedó una sensación ambigua. Por un lado se que no todos los dias se gana un diploma olímpico, pero por otro tengo la sensación de que podía haber ganado una medalla, de hecho estuvo a una sola lucha de conseguirlo y me queda la tranquilidad de haber entregado todo", expresó el tucumano a Télam.

El tucumano demostró mucha actitud en sus primeros combates, que resolvió por la vía rápida, y en los que dejó claro que está a la altura de los mejores.

En su presentación ante Ratzimisiva, dominó desde el principio y logró desestabilizar con una definición rápida que se veía venir porque su superioridad era marcada.

En tanto, contra el francés Schmitt, el dominio no era tan notorio pero igual sorprendió con una acción rápida que determinó su victoria final y el pase a luchar contra el coreano, número uno del mundo.

"El triunfo sobre el francés fue el más importante de mi carrera deportiva, por el contexto en el que se produjo", admitió emocionado el tucumano, seguido desde la platea por su padre.

En la tercera pelea, el dominio de Kim fue abrumador, a Lucenti le costó generar tomas, también se agudizó el dolor en el aductor y cada vez que fue al piso demoró una eternidad en levantarse, de manera que no extrañó el triunfo final claro del coreano.

Con un gimnasio ExCel ocupado por casi la totalidad de las cinco mil ubicadines disponibles y el apoyo desde la tribuna del también tucumano Horacio Muratore, ex presidente de la Confederación Argentina de Basquetbol, el norteño salió e su última pelea en busca de una posibilidad de ir por el bronce o bien asegurarse el diploma.

El combate final fue parejo pero se inclinó en favor del canadiense con una toma que tumbó al tucumano a los 2 minutos y 48 segundos de combate, y eso lo condicionó un poco para lo que vino después.

"Fue un rival duro, le gané las tres primeras peleas y el me superó en las cuatro últimas", recordó Lucenti, quien enfrentó al canadiense en los Juegos Panamericanos Guadalajara 2011 y perdió por ipon. El canadiense sacó ventajas claras y Lucenti debió resignarse, aunque su actuación fue promisoria y junto a Paula Pareto le dieron a la Argentina dos diplomas en judo, lo que no es poco en la especialidad.

Otros dos judocas argentinos intentarán emular a Pareto y Lucenti, será entre mañana y el jueves. Mañana en la división hasta 90 kilos, el rionegrino Héctor Campos tendrá un duro cruce inaugural ante el cubano Asley González, mientras que el jueves, el bonaerense Cristian Schmidt, en la categoría hasta 100 kilos, se medirá con el bieloruso Yauhen Biadulin.