Mario Alberto Kempes ya no tiene ningún vínculo formal con Rosario Central. El Matador, uno de los máximos ídolos canallas, explicó este martes que dejó de ser embajador itinerante del club porque “la situación económica –de la entidad de Arroyito– no daba para que siguiera”.

El ex delantero de la selección argentina accedió a dejar el cargo con el que había sido distinguido este año, en una salida que se concretó –según aseguró– “en buenos términos” con la dirigencia que preside Horacio Usandizaga.

“La situación no estaba para que yo estuviera ahí. Las cosas económicas no están bien”, dijo en el programa Zapping Sport (Radio 2).

Además, Kempes argumentó que el momento del primer equipo no permitió proyectarlo durante la pasada pretemporada en el plano internacional. De acuerdo a lo que planteó el Matador, con Central en la promoción, se le hizo imposible coordinar encuentros amistosos de peso.

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El cordobés de Bell Ville también se refirió al momento que atraviesa Central hoy, entre la caída en el torneo y los reclamos por los arbitrajes adversos. “Tuvo un comienzo prometedor y después se cayó, pero a la larga se van a dar los resultados”, analizó.

Y sobre la derrota el pasado viernes ante San Lorenzo, con el árbitro Pablo Lunati como blanco de todas las críticas, no anduvo con vueltas: “Fue un robo a mano armada”, opinó.

Por último, consultado sobre la posibilidad de que el estadio de Arroyito pase a llevar su nombre –mientras que en Newell´s parece inminente el cambio a “Marcelo Bielsa”–, el ahora ex embajador auriazul se negó y dijo que la denominación de “Gigante” es la apropiada.
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Kempes afirmó que ya no es embajador de Central en el mundo