¿Llega el turno de que los hogares de alto consumo ajusten su consumo energético? La versión que circuló este miércoles indicaba que Daniel Cameron, secretario de Energía, iba a presentar un proyecto para tal fin al presidente Néstor Kirchner, quien analizaba esta posibilidad.

Sin embargo, fuentes del gobierno salieron al cruce de los rumores y desmintieron que, por el momento, se piense aplicar una medida de esas características. Y poco después el presidente mismo aclaró que "no hay previsto cortes domiciliarios (de energía) ni aumentos de tarifas" durante un acto en Casa de Gobierno.

"De ninguna manera el Gobierno está analizando un plan que contemple un corte a los usuarios residenciales", había asegurado en primera instancia el vocero del Ministerio de Planificación Federal, Alfredo Scocimarro, a una radio porteña. El funcionario remarcó que "no hay ninguna posibilidad de corte a las casas de familia", y afirmó que "no hay ningún plan que se esté analizando para cortar la luz a los usuarios residenciales".

La única salida posible si Kirchner dice que no es extender las interrupciones a la industria, con suspensiones de personal como consecuencia.

Culpa de la sequía

La situación mejoraría si llegara a llover. Es que la sequía pone de relieve como nunca antes desde hace por lo menos 20 años, las dificultades del abastecimiento de energía.

Si no llueve se prevé que se profundizará la crisis a fines de la semana próxima, porque dejarán de funcionar las centrales de Piedra del Aguila y Alicurá. Si llueve aunque sea un poco, quizá todo se postergue algunos días. Pero la situación es lo suficientemente grave como para que las empresas la puedan afrontar con la estructura que tienen. En este sentido, el gobierno volvió a decidir cortes para compañías medianas y grandes entre las 16 y las 0, con lo que pretendió ahorrar 1200 megavatios.

Situación dramática

El ingeniero Gerardo Rabinovich, integrante del Instituto de Energía de Argentina señaló que la situación es crítica. "Se está por entrar a una fase aguda, porque se juntan todos los factores desfavorables inclusive el clima", señaló Rabonivich.

En este sentido el especialista en energía apuntó que la situación es problemática pero que hay que tener en cuenta que no se trata del invierno más frío que se pueda tener. "Hay que recordar que otros años han sido más crudos y que hasta el momento no se registraron temperaturas bajo cero", dijo Rabinovich.

Por último, se mostró en desacuerdo con la decisión del gobierno, pero aclaró: "En el caso que se decida llevar a cabo cortes de energía es preciso dar la información adecuada a la población. Tanto hogares como industria deben saber cómo, cuándo y cuánto se quedarán sin suministro eléctrico", dijo.