La Central de Trabajadores Argentinos (CTA) que lidera Pablo Micheli se sumó al reclamo de la Confederación General del Trabajo (CGT) de Hugo Moyano y pidió abrir las paritarias “inmediatamente”. Ponderó que, en el actual contexto económico, hay que mantener la mesa de diálogo abierta. Pidió un piso del 35% de aumento y un adelanto de 3.000 pesos.
En diálogo con el periodista Ciro Seisas, del programa A Diario, el titular de la CTA opositora señaló que las negociaciones salariales deberían realizarse “cada vez que se soliciten”.
Así ilustró que la devaluación de las últimas semanas obligó a repensar los números. Ahora, Micheli señaló que, “para salir derechos”, se necesita un incremento salarial de no menos del 35 por ciento.
Además, así como los aceiteros y choferes de la UTA consiguieron un adelanto de 2.000 pesos tras la medida de fuerza del fin de semana, el sindicalista pide un pago para sus trabajadores de 3.000 pesos.
Para Micheli, “la situación es peor que otros años porque atravesamos una terrible devaluación que genera miles y miles de pobres nuevos en la Argentina”.
