Se puso en marcha el programa nacional de seguimiento postrasplante que garantiza la provisión gratuita y de por vida de medicamentos para pacientes trasplantados de bajos recursos y sin obra social.

De este modo, el gobierno nacional empieza a dar cumplimiento a la Ley Nacional de Trasplantes, en cuyo artículo 14 se establece que “el Ministerio de Salud de la Nación deberá asegurar la provisión de los medicamentos y procedimientos terapéuticos necesarios que surjan como consecuencia de los trasplantes realizados en personas sin cobertura y carentes de recursos, conforme lo establezca la reglamentación”.

El programa nacional de seguimiento postrasplante tiene el objetivo de asegurar el acceso a los medicamentos inmunosupresores a una población con riesgos especiales, en condiciones de alta vulnerabilidad social.

Se trata de 1.108 personas en todo el país –alrededor de 60 en toda la provincia de Santa Fe y 20 en Rosario en particular– para cuya atención el Ministerio dispuso una partida de 4 millones de dólares (casi 600 mil serán destinados a pacientes de Santa Fe).

“Nosotros ya veníamos dándoles cobertura –aclaró el presidente del Centro Único de Ablación e Implante de Órganos (Cudaio), Lelio Pire, a Rosario3.com– ya que estamos organizados como regional, pero es bueno que la Nación se haga cargo porque otras provincias no tienen presupuesto para garantizar la provisión de medicamentos a sus pacientes trasplantados”.

En Santa Fe el Cudaio es el organismo encargado actualmente de brindar la cobertura a las personas carenciadas, no sólo del trasplante sino también del tratamiento pre y postrasplante durante los seis meses posteriores a la intervención. De allí en adelante, es el Ministerio de Salud de la provincia el que le garantiza la provisión de los medicamentos de por vida.

“Todo paciente trasplantado necesita medicarse de por vida con inmunosupresores que disminuyen el rechazo del cuerpo a nuevo órgano, explica Pire. Y concluye: "Un paciente hipertenso que un día no toma su medicación puede hacer un pico de presión, pero un trasplantado que no toma el inmunosupresor rechaza el órgano que recibió, por eso es esencial que no se discontinúe la medicación”.

Si bien desde la Nación se anticipó que el servicio se brindaría desde septiembre, el Cudaio asegura que recién en 30 o 60 días los medicamentos empezarán a llegar a Santa Fe para ser distribuidos a los hospitales donde se atienden los pacientes trasplantados. En tanto, en aquellas provincias que no cuentan con un centro de ablación y trasplantes, el envío se hará en forma directa a los hospitales zonales.