En 2005, perdieron su vida más de medio millón de mujeres que estaban embarazadas o bien, murieron al momento de dar a luz. Las cifras se desprenden de un estudio publicado este jueves por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Ginebra.
La comunidad científica y organismos internacionales consideran que este estudio es un verdadero alerta ya que implica que la mortalidad materna está descendiendo por debajo del uno por ciento cada año cuando lo que se busca es, por lo menos, una reducción del orden del 5,5.
Según los registros de la OMS, en el año 2005 murieron 536.000 mujeres durante el embarazo o al momento de dar a luz. Mientras que en 1990, quince años atrás, habían muerto 40.000 mujeres más por las mismas causas.
Un dato relevante es que el 99 por ciento de las muertes ocurrió en países en desarrollo. Allí, en 2005, de cada 100.000 nacimientos vivos se registraron 450 muertes maternas. En los países industrializados, en cambio, esa cifra es de 9 muertes cada 100.000 nacimientos.
De acuerdo a lo vertido por el informe, si la disminución de la mortalidad materna continúa a este ritmo, la ONU no logrará llegar a los objetivos planificados para 2015 que giraban en torno a la disminución para ese año de un tercio de los valores de 1990.
