El aeropuerto internacional de Rosario retomó las actividades luego de recibir una amenaza de bomba este lunes al mediodía. Todo el personal había desalojado a un parque contiguo al edificio, pero pasadas las 13.30 pudieron regresar a sus puesto. La policía realizó tareas de rastrillaje, con resultado negativo. No se necesitó reprogramar vuelos.

La vocera del aeropuerto local, Cecilia Gabenara Boero, señaló en contacto con De 12 a 14 (El Tres) que “alrededor de las 11.30 recibimos una amenaza de bomba y la Policía Aeroportuaria decidió desalojar el edificio”.

La vocera contó que se realizaban “tareas de rastrillaje con perros”, que finalmente no arrojaron resultados positivos. A partir de esa certeza, la Policía habilitó el regreso de los empleados y de los usuarios al aeropuerto. 

Es la segunda vez que el aeropuerto registra un episodio de este tipo: “En los primeros días de febrero recibimos una amenaza de bomba también”, confirmó la vocera.