La interrupción momentánea de la respiración mientras se duerme, también llamada apnea del sueño, afecta al 4% de la población, aunque muchos no saben que la padecen y están expuestos a sufrir hipertensión o eventos cardiovasculares, informó el Ministerio de Salud bonaerense.

En la provincia de Buenos Aires se estima que esta patología afecta a unas 500.000 personas, y por esa razón acaban de instalar en el Hospital Cetrángolo de Vicente López un aparato que mide las alteraciones en el sueño.

"Se cree que las apneas están subdiagnosticadas, es decir, que muchos de los afectados no saben que las padecen, por lo tanto, sumar esta tecnología a un hospital público permitirá una detección precisa del problema", explicó el ministro de Salud de esa provincia Claudio Zin.

Se trata de un polisomnógrafo, un aparato de última generación que permite estudiar diferentes parámetros fisiológicos mientras el paciente duerme en un consultorio del hospital especialmente acondicionado como un dormitorio, informó el Ministerio.

Daniela Visentini, neumonóloga del Cetrángolo, dijo que "las apneas alteran no sólo la calidad del sueño sino también la vigilia, porque quien la sufre padece cansancio, dolores de cabeza y un mayor riesgo de arritmias cardíacas, hipertensión, infartos y accidentes cerebrovasculares".

La médica destacó que las apneas obstructivas "impiden que la persona pueda respirar, ronca, se queda sin aire y hace una pausa en la respiración que en los adultos se extiende por diez segundos y causa un despertar por hipoxia, que es la disminución del oxígeno en sangre" "El paciente intenta que entre aire por nariz o boca, los músculos del abdomen y el tórax hacen fuerza para lograrlo y, en esa secuencia, termina por despertarse”, explicó la especialista.

Cuando la persona deja de respirar "se produce una liberación brusca de adrenalina, que es como una señal de alarma, la persona se despierta y esto trae aparejado un sueño fragmentado e insatisfactorio junto a un aumento de la presión arterial durante el sueño que puede derivar en hipertensión”, advirtió Visentini.

Fuente: Télam