Para el gobernador Jorge Obeid será un distintivo, un símbolo más, un emblema para la ciudad. La cruz más alta que tendrá Rosario se instalará en el barrio Rucci y será donada por el empresario René Francovigh a la parroquia Natividad del Señor, que conduce el padre Ignacio Peries.

La cruz se está terminando de fabricar en la fábrica metalúrgica de Francovigh, en la zona sur de la ciudad, y Obeid fue a verla junto con el sacerdote, que anticipó que la bendición del símbolo religioso se realizará el próximo 8 de diciembre, el Día de la Virgen.

Francovigh dijo que se buscó no sólo que sea grande sino también que "sea linda" y que por eso llamó a un concurso para la realización de la misma, en el que se presentaron 30 proyectos. Y que la cruz se va a ver de día y de noche, ya que tendrá una iluminación especial.