La alteración de la matriz macroeconómica, con especial énfasis en la maxidevaluación cambiaria, ha implicado cambios radicales en lo concerniente a la composición del crecimiento, en comparación a lo vislumbrado en la década pasada .

Si se toma el segmento comprendido entre el año 2002 y el primer semestre del año en curso, la expansión de la actividad económica (medida a precios constantes del año 1993 como forma de eliminar el sesgo inflacionario) se ha ubicado en el 35.5%, transformándose en uno de los períodos de recuperación más vigoroso de la Historia Argentina tras una crisis.

En este contexto, aunque por diferentes motivos, la industria y la construcción han jugado un papel trascendental, contribuyendo fuertemente ambos a la creación de valor y generación de empleo.

En lo que atañe a la industria, su dinamismo en los últimos tres años y medio ha estado marcado por un tipo de cambio que reavivó a diversos complejos exportadores, a la vez que permitió el ansiado resurgimiento de otros sectores rezagados vía un proceso de sustitución de importaciones. No obstante, el esquema cambiario no ha sido el único driver para el apalancamiento de esta actividad, debiéndose mencionar la excesiva capacidad ociosa que existía en el año 2003 (que no tornó necesario inversiones en el corto plazo) y el abaratamiento relativo de la mano de obra que ha forjado cambios en las funciones de producción de las empresas.

Por su parte, en lo que concierne a la construcción, las bases para su crecimiento se han vinculado fundamentalmente con la percepción por parte de los agentes económicos, desde finales de 2001, de que los activos inmobiliarios constituyen la alternativa más atractiva y confiable como reserva de valor para sus ahorros. Adicionalmente, aunque en menor medida en términos de impacto sobre la actividad, debe tenerse en cuenta el protagonismo que ha ostentado la obra pública en los últimos años, erigiéndose en uno de los instrumentos fundamentales a los que ha recurrido este gobierno para apuntalar el desempeño económico.

Industria

La industria manufacturera, desde el año 2003, ha exhibido un crecimiento permanente en sus niveles de producción, aunque de la mano de una cada vez mayor utilización de la capacidad instalada. De hecho, el aprovechamiento de la dotación de capital productivo de la industria en general pasó de un 59% en enero de 2003 a un 72% en junio del corriente año.

En cuanto al ritmo de expansión de este sector, puede apreciarse en la Tabla Nº 1 que en el bienio 2003-2004 el salto fue superior al registrado en toda la economía (cercano al doble en 2003 y un 50% superior en 2004). En tanto, en el año 2005 y en el primer semestre del corriente la tendencia se ha revertido, siendo la variación en la industria inferior a lo vislumbrado en términos generales.

Por otra parte, queda de manifiesto que la industria manufacturera ha exhibido en el período bajo estudio una desaceleración permanente en sus tasas de crecimiento, en sintonía con la normalización de los indicadores económicos y con el mayor aprovechamiento de la capacidad productiva. Para el año en curso, si bien se cuenta con datos para el primer semestre, en términos anualizados todo indica que podría registrarse una leve contracción en la tasas de crecimiento sectorial.

Tabla Nº1- Variación anual de la industria y la economía en general. Período 2003-2006

Concepto

Var % anual

2003

2004

2005

I Sem 2006

PIB A PRECIOS DE MERCADO

8,8

9,0

9,2

4,6

INDUSTRIA MANUFACTURERA

16,0

12,0

7,5

3,1

                    Fuente: Elaboración propia en base a datos del INDEC



En lo que atañe a la participación en el Producto Bruto Interno (Tabla Nº 2), se advierte que a pesar de la merma en el ritmo de expansión en el período post-crisis, este sector se ha estabilizado por encima del 16% en el segmento 2003-2006.

Tabla Nº2- Participación de la industria en la economía.

Período 2003-2006

Concepto

% PBI

2003

2004

2005

I Sem 2006

INDUSTRIA MANUFACTURERA

16,4

16,8

16,6

16,3

Fuente: Elaboración propia en base a datos del INDEC



No obstante, una cuestión que no debe soslayarse, y que resulta lo más interesante de este análisis, es la significativa caída que ha sufrido este sector en lo concerniente a su aporte al crecimiento económico en los últimos años (Tabla Nº 3). En efecto, mientras que en el año 2003 la contribución del sector industrial era prácticamente del 28%, en el transcurso de 2006 se ubica ligeramente por encima del 11%.

Tabla Nº3- Contribución de la industria al crecimiento del PBI.

Período 2003-2006

Concepto

 Contribución al crecimiento del PBI

2003

2004

2005

I Sem 2006

INDUSTRIA MANUFACTURERA

27,8

21,7

13,7

11,1

                 Fuente: Elaboración propia en base a datos del INDEC


Esta pérdida de dinamismo que se percibe en el desempeño del sector industrial encuentra su justificación en una serie de factores determinantes. En primer término, se puede mencionar un proceso inversor insuficiente, alentado por la incertidumbre del aprovisionamiento energético, que tiene su correlato en un continuo aumento en la utilización de la capacidad instalada en la industria, generando ulteriormente cuellos de botellas en diversos rubros[1]. En segundo lugar, debe hacerse referencia a la pérdida de competitividad que implica la lenta erosión que sufre el tipo de cambio real (si bien todavía se encuentra en niveles elevados), en función de que la inflación se expande a ritmo más acelerado que el tipo de cambio nominal. Por último, debe considerarse la falta de incentivos que ocasiona para el empresariado la política de precios máximos que aplica el gobierno como estrategia para estabilizar los precios.

En función de lo anterior, si no se altera este panorama incierto, lo más probable es que la industria en el corto plazo vea que su contribución al crecimiento de la economía se reduce en forma drástica, y con ello su capacidad para dinamizar el mercado laboral.

Construcción

El sector de la construcción, desde que se ha recobrado la senda expansiva en la economía, ha mostrado tasas de crecimiento muy significativas[2]. De hecho, en el trienio 2003-2005 la variación interanual ha excedido el 20% en todos los casos.

Esta destacable performance le ha valido a esta actividad transformarse en el sector más pujante de la economía desde la salida de la convertibilidad, a la vez que en forma indirecta derrama enormes beneficios en actividades conexas.

Como se mencionó anteriormente, su despegue estuvo fuertemente vinculado al descrédito que despertó el sistema financiero, una vez que se incautaron los depósitos de los ahorristas a finales de 2001. Esta medida confiscatoria generó como consecuencia que se multiplicaran los proyectos inmobiliarios a nivel nacional, incrementándose en forma sostenida los valores de las propiedades, a pesar de enfrentarse a un contexto de ausencia virtual del crédito.

En lo que se refiere al crecimiento registrado en esta actividad, se observa en la Tabla Nº 4 que en todo el período bajo análisis su ritmo de expansión fue claramente superior al de toda la economía.

En este caso, la notoria desaceleración en la tasa de crecimiento no está ligado a un agotamiento en el sector (como puede suponerse en diversas ramas industriales), sino a la mejora periódica de la base con la cual se realiza la comparación.

 

Tabla Nº4- Variación anual de la construcción y la economía

en general. Período 2003-2006

Concepto

Var % anual

2003

2004

2005

I Sem 2006

PIB A PRECIOS DE MERCADO

8,8

9,0

9,2

4,6

CONSTRUCCION

34,4

29,4

20,4

7,8

                Fuente: Elaboración propia en base a datos del INDEC



Una mirada sobre su participación en el Producto Bruto Interno (verTabla Nº 5) indica el franco crecimiento que ha presentado el sector de la construcción en el segmento 2003-2006, pasando del 4.4% al 6% entre puntas.

 Tabla Nº5- Participación de la construcción en la economía.

Período 2003-2006.

Concepto

 % PBI

2003

2004

2005

I Sem 2006

CONSTRUCCION

4,4

5,2

5,8

6,0

                Fuente: Elaboración propia en base a datos del INDEC

Sin embargo, cuando se analiza su aporte al crecimiento económico nacional (verTabla Nº 6) es donde se pone de manifiesto el real impacto que ha tenido este rubro en los últimos años.

Tabla Nº6- Contribución de la industria al crecimiento del PBI.

Período 2003-2006

Concepto

 Contribución al crecimiento del PBI

2003

2004

2005

I Sem 2006

CONSTRUCCION

13,9

14,4

11,6

9,7

                Fuente: Elaboración propia en base a datos del INDEC

Como puede observarse, a pesar de contar con una exigua participación en el Producto Bruto Interno, su aporte a la expansión de la actividad en general es considerable, lo cual se explica por el robusto crecimiento sectorial registrado en la era post-convertibilidad.

Asimismo, se advierte que el sector de la construcción, si bien ha evidenciado una reducción en su contribución al crecimiento económico en los últimos años, su evolución ha sido más homogénea que en lo concerniente a la industria. Esto estaría indicando que, de proseguir el ciclo expansivo en la economía doméstica, la construcción progresivamente acrecentará su porción en el Producto Bruto Interno.


Consideraciones generales

Desde la alteración del régimen cambiario, la construcción y la industria han presentado un destacado comportamiento, con un ritmo de expansión que, a pesar de haber sido decreciente, los sigue ubicando como los rubros más dinámicos bajo la actual estructura de precios relativos.

En este sentido (verTabla Nº 7 ), la industria manufacturera ha explicado casi la quinta parte del crecimiento acumulado desde el año 2002, en tanto que la actividad de la construcción ha contribuido con más del 12%. De esto se desprende que conjuntamente han aportado casi la tercera parte de la expansión de la actividad doméstica desde que se ha revertido el ciclo económico.

Tabla Nº7- Tasa de crecimiento y contribución al crecimiento para la construcción y la industria. Período 2003-2006

Concepto

2002- I Sem 2006

Var %

Contr. Crec econ

INDUSTRIA MANUFACTURERA

43,8

19,0

CONSTRUCCION

125,6

12,6

                       Fuente: Elaboración propia en base a datos del INDEC

No obstante este auspicioso panorama para ambos rubros, deben realizarse una serie de consideraciones que denotan realidades sectoriales diferentes. En primer lugar, la tasa de variación de la construcción en términos acumulados ha prácticamente triplicado a la de la industria, lo cual no resulta casual si se observa la evolución de la inversión a nivel nacional en el período bajo estudio. La misma, refleja que la ponderación de la construcción en el total de inversiones ha superado holgadamente el 60%[3] desde el año 2002, relegando parcialmente a las inversiones en maquinarias y equipos.

En segundo término, se detecta como en los últimos años se ha achicado la brecha entre ambos sectores en lo que a contribución al crecimiento se refiere. En efecto, mientras que en el año 2003 la diferencia en favor de la industria trepaba al 13.9%, en 2004 era del 7.4%, en 2005 del 2% y en el primer semestre de 2006 se ubica en el 1.4%. Esto indica, que de sostenerse esta tendencia, la construcción a corto plazo va a revestir más importancia que la industria como factor dinamizador de la actividad económica.


[1] A junio de 2006 cinco rubros industriales exhibían una utilización de su capacidad instalada superior al 75%. Estos son: Industrias Metálicas Básicas (97.6%), Refinación de Petróleo (94.6%), Productos Textiles (87.1%), Sustancias y Productos Químicos (76.2%) y Papel y Cartón (75.8%).
[2] La construcción es de carácter procíclico, lo que implica que en momentos de prosperidad económica crece por encima de lo que lo hace el producto, en tanto que en períodos de recesión exhibe una merma superior a la media
[3] Las participaciones de la construcción en el total de inversiones han sido las siguientes para el período post-convertibilidad: 2002 (68.9%), 2003 (67.3%), 2004 (63%) y 2005 (61.8%).

Por Lic. Iván Barbero del Instituto de Estudios Económicos de la Fundación Libertad.