El insomnio familiar fatal o letal (IFF) es una enfermedad hereditaria muy rara surgida a partir de la mutación de un gen, que vuelve a las personas que la padecen incapaces de conciliar el sueño. Esto daña el cerebro, y conlleva un deterioro cognitivo" que acaba con la vida del individuo.

La particularidad de esta enfermedad es que la mitad de los casos detectados en todo el mundo se concentran en dos comunidades autónomas de España, como Navarra y el País Vasco. En este último habría tenido su origen hace varios siglos.

Quien la padece, cada vez tiene más dificultad para dormir hasta que alcanza un "estado entre la vigilia y el sueño", según indicó la especialista Raquel Sánchez-Valle, del Hospital Clinic de Barcelona.

De esta manera, el cerebro se empieza a dañar, provocando un "deterioro cognitivo" y una "alteración motora importante" que acaba con la vida del individuo en un periodo de entre uno y tres años, aunque a veces es cuestión de meses, según consignó 20 Minutos.

La crueldad de la enfermedad radica en que al ser hereditaria, la persona cuenta con familiares directos que la han padecido, y por ende sabe cómo acaba todo, ya que es progresiva y no cuenta con tratamiento alguno.