Más de 136.000 niños, adolescentes, adultos y adultos mayores asistieron a las casi 300 actividades programadas en los seis distritos de la ciudad con motivo de las vacaciones de invierno que concluyeron el domingo, según informó la Secretaría de Cultura y Educación Municipal. La cifra prácticamente duplicó a la registrada durante el receso del año pasado.
Las actividades, que fueron organizadas por Cultura local junto al Ministerio de ése área a nivel provincial, e instituciones y organizaciones de la ciudad, fueron vistas por familias rosarinas y visitantes de localidades vecinas y otras provincias, que no sólo se apropiaron de cada rincón de la ciudad, sino que pudieron optar por un vasto programa que tuvo como ejes la recreación y el aprendizaje, y que incluyó alrededor de 300 propuestas que se desarrollaron en múltiples espacios de los seis distritos.
En este marco, La Granja de la Infancia, El Jardín de los Niños y La Isla de los Inventos, que conforman el Tríptico de la Infancia municipal, se consolidaron una vez más como los escenarios preferidos de chicos y grandes, alcanzando los 94.512 asistentes en 14 jornadas (los lunes hubo receso).
Otros lugares elegidos, y que superaron entre todos la cifra de 40.000 espectadores, fueron los centros culturales Cine Lumière, Parque Alem, Bernardino Rivadavia, Parque de España, Estación Parque Urquiza, Casa de la Cultura Barrio Alvear, Estación Antártida Argentina, El Obrador y La Trinchera, entre otros; las sedes de los Centros Municipales de Distrito (CMD), a los que se le sumaron vecinales, clubes, centros comunitarios, playones y predios deportivos, y parques y plazas distritales.
También los museos de la Ciudad, de Arte Decorativo Firma y Odilo Estevez, de Arte Contemporáneo de Rosario (Macro) y de Bellas Artes Juan B Castagnino; el Complejo Astronómico, la biblioteca José M. Estrada, el teatro La Comedia, el cine El Cairo y la Escuela de Artes Urbanas, entre otros.
Hubo de todo y para todos, inclusive para los bebés. La programación incluyó proyección de películas y obras audiovisuales, espectáculos de teatro, títeres, marionetas, cuentos, música, circo, clown y danza, recorridos y talleres educativos y jornadas deportivas, de dibujo y pintura, entre otras propuestas.
Así, se pueden nombrar obras y musicales infantiles como Ito, teatro para bebés, Viajes de papel, Talindo. Música para niños (y no tanto), Una ratita presumida, Asulunala, Apapachaditos y Quién es más guapo, en el marco del Festival Nacional 8 Espectáculos con Yapa; Atrapavientos, La vuelta al mundo, Todos a cantar con todos, Cuentos animados, Aguafiestas. El rock es cosa de chicos, Pa'chancletas y purretes, el 2º Festival de Cortometrajes Ojo al Piojo! y El Robot Cebamates, excelentes puestas en escena con la participación de destacados artistas que formaron parte, junto a otras, de una amplia agenda de actividades.
Días de sol en parques y plazas
Con jornadas a pleno sol, más allá de las bajas temperaturas, los espacios verdes también se vieron poblados de niños corriendo, jugando a la pelota, andando en bicicletas, remontando barriletes o extasiados con algún espectáculo, mientras que los mayores compartían mate y, muy especialmente, la alegría y la risa de los pequeños.
Si bien es casi imposible cuantificar la cantidad de asistentes a parques y plazas de la ciudad durante estas vacaciones, de lo que no hay dudas es que tanto los rosarinos, como los que visitaron la ciudad, aprovecharon, en la medida de lo posible, el clima bastante benévolo, el aire libre y los buenos momentos de ocio.
Las actividades, que fueron organizadas por Cultura local junto al Ministerio de ése área a nivel provincial, e instituciones y organizaciones de la ciudad, fueron vistas por familias rosarinas y visitantes de localidades vecinas y otras provincias, que no sólo se apropiaron de cada rincón de la ciudad, sino que pudieron optar por un vasto programa que tuvo como ejes la recreación y el aprendizaje, y que incluyó alrededor de 300 propuestas que se desarrollaron en múltiples espacios de los seis distritos.
En este marco, La Granja de la Infancia, El Jardín de los Niños y La Isla de los Inventos, que conforman el Tríptico de la Infancia municipal, se consolidaron una vez más como los escenarios preferidos de chicos y grandes, alcanzando los 94.512 asistentes en 14 jornadas (los lunes hubo receso).
Otros lugares elegidos, y que superaron entre todos la cifra de 40.000 espectadores, fueron los centros culturales Cine Lumière, Parque Alem, Bernardino Rivadavia, Parque de España, Estación Parque Urquiza, Casa de la Cultura Barrio Alvear, Estación Antártida Argentina, El Obrador y La Trinchera, entre otros; las sedes de los Centros Municipales de Distrito (CMD), a los que se le sumaron vecinales, clubes, centros comunitarios, playones y predios deportivos, y parques y plazas distritales.
También los museos de la Ciudad, de Arte Decorativo Firma y Odilo Estevez, de Arte Contemporáneo de Rosario (Macro) y de Bellas Artes Juan B Castagnino; el Complejo Astronómico, la biblioteca José M. Estrada, el teatro La Comedia, el cine El Cairo y la Escuela de Artes Urbanas, entre otros.
Hubo de todo y para todos, inclusive para los bebés. La programación incluyó proyección de películas y obras audiovisuales, espectáculos de teatro, títeres, marionetas, cuentos, música, circo, clown y danza, recorridos y talleres educativos y jornadas deportivas, de dibujo y pintura, entre otras propuestas.
Así, se pueden nombrar obras y musicales infantiles como Ito, teatro para bebés, Viajes de papel, Talindo. Música para niños (y no tanto), Una ratita presumida, Asulunala, Apapachaditos y Quién es más guapo, en el marco del Festival Nacional 8 Espectáculos con Yapa; Atrapavientos, La vuelta al mundo, Todos a cantar con todos, Cuentos animados, Aguafiestas. El rock es cosa de chicos, Pa'chancletas y purretes, el 2º Festival de Cortometrajes Ojo al Piojo! y El Robot Cebamates, excelentes puestas en escena con la participación de destacados artistas que formaron parte, junto a otras, de una amplia agenda de actividades.
Días de sol en parques y plazas
Con jornadas a pleno sol, más allá de las bajas temperaturas, los espacios verdes también se vieron poblados de niños corriendo, jugando a la pelota, andando en bicicletas, remontando barriletes o extasiados con algún espectáculo, mientras que los mayores compartían mate y, muy especialmente, la alegría y la risa de los pequeños.
Si bien es casi imposible cuantificar la cantidad de asistentes a parques y plazas de la ciudad durante estas vacaciones, de lo que no hay dudas es que tanto los rosarinos, como los que visitaron la ciudad, aprovecharon, en la medida de lo posible, el clima bastante benévolo, el aire libre y los buenos momentos de ocio.
