La mujer estaba convencida. La conducta de su hijo merecía un castigo ejemplar. Y fue bestial: le quemó las manos con agua hirviendo.

Ocurrió en la localidad de Soldini. Los protagonistas, una mujer de 31 años y su hijo de 13, al que le quemó las manos por haber asaltado dos veces la misma escuela de esa localidad vecina a Rosario.

El primer robo, informó el periodista Héctor López, fue el 2 de febrero, el segundo el 14 del mismo mes. Luego del último hecho, el chico fue detenido por la policía. Pero en razón de su edad se le dio la custodia a su madre, que, enojada, le arrojó agua hirviendo en las manos.

El menor tiene serias quemaduras y debió ser internado en el Hospital Centenario. La madre fue denunciada por su hija en la comisaría, cuya titular, Cristina Machado, ya dio intervención a la Justicia.