El desplazado jefe de policía de la provincia, Gabriel Leegstra, se mostró emocionado este jueves durante el acto en el que asumió su reemplazante y aseguró que se retira de su cargo "con la frente alta y tranquilo porque he hecho cumplir las leyes".
En declaraciones a la radio universitaria de la ciudad capital, el policía a quien el ministro de Gobierno Roberto Rosúa le pidió la renuncia luego de que se hiciera público un sumario a quien hoy está al frente de Drogas Peligrosas en Rosario, aseguró que no se arrepiente de la decisión de iniciar la investigación sobre el accionar de Alejandro Franganillo e incluso planteó que "debe continuar; no se puede dar marcha atrás".
Leegstra sostuvo que su imagen no se ve "opacada" por lo sucedido en los últimos días. "La gente me conoce, la policía me conoce y estoy dispuesto a afrontar cualquier investigación", señaló en declaraciones a la prensa durante el acto en el que asumió en su lugar el comisario Daniel Cáceres.
Según Leegstra "hubo malestar en la fuerza" por su remoción. "Obviamente que cuando son cosas así, intempestivas, la gente se shockea. Pero ahora la fuerza está tranquila y se está trabajando normalmente", planteó.
Consultado sobre Franganillo, opinó: "Realizó un trabajo aceptable y prolijo al frente de Drogas Peligrosas de Rosario pero no disminuyó las estadísticas del narcotráfico, como quiere hacer aparecer la jueza Cosidoy”. El renunciante jefe de la policía, consideró que su desplazamiento se debe a sus declaraciones sobre las instrucciones del sumario.