Santiago López Menéndez, el joven argentino que había sido secuestrado este miércoles en Nigeria, fue liberado esta tarde, luego de que la empresa para la que trabaja pagara el rescate exigido por sus captores.

Desde el primer momento, el embajador y el cónsul argentino estuvieron en el lugar, y fueron quienes encabezaron las negociaciones.

A Santiago López Menéndez se lo llevaron cuatro hombres armados el miércoles por la mañana, cuando llegaba al campo donde trabaja en una zona rural a cinco horas de la capital del país sudafricano.

Desde entonces, su familia esperaba comunicarse con él. El grupo que lo secuestró pidió un rescate a la empresa para la que trabaja Santiago, Flour Mills. Su hermano Jorge también había contado que le daban de comer y lo trataban bien.

Santiago, que vive en Nigeria desde hace más de un año con su novia por motivos laborales, había sido secuestrado el miércoles pasado por la mañana por hombres armados mientras organizaba la jornada de siembra de maíz y soja junto a un grupo de empleados locales. "¡No queremos lastimar a nadie! ¡No queremos matar a nadie!", dijeron los secuestradores antes de llevarse sólo al joven argentino en su propia camioneta.

Este viernes pudo comunicarse con su familia. Esa fue la primera prueba de vida que ofrecieron sus captores.