Sí, los mosquitos se han convertido en una verdadera tortura en estos tiempos de calor y humedad. Pican, pican y pican. Y se han convertido en todo un dolor de cabeza para el intendente Miguel Lisfchitz, que a donde va recibe el reclamo para que se fumigue y hasta tiene su espacio de Facebook colmado de mensajes en ese sentido.

“Hemos fumigado mucho más que otros años, pero las condiciones climáticas han sido en este caso muy favorables para los mosquitos. Es una lucha en la que a veces logramos algún triunfo, pero en general los mosquitos avanzan cuando hay calor y hay lluvia”, afirmó.

El intendente dijo que campaña de fumigación que lleva adelante la Municipalidad “es muy intensa” y que se apunta no sólo al “mosquito más molesto pero a la vez inofesinvo” sino también al aedes aegiptys, que es el que transmite el dengue.

Así, el jefe comunal se hizo eco de las quejas de los rosarinos. Agunos de ellos, como Eloy Barraza, le hicieron llegar a Lifschitz su reclamo a través de Facebook y, pese a las picaduras, no perdieron el hunor. “Miguel: si me pican siete (7) mosquitos más, tengo pensado suicidarme y broadcastearlo en vivo para YouTube. Lo dejo a tu criterio”, advirtió el hombre. ¿No será demasiado?