Más de cien dueños y peones de taxis se reunieron este sábado al mediodía en el anfiteatro municipal, con el fin de charlar y debatir sobre varios temas que los mantienen preocupados. El ítem principal son los hechos de inseguridad, que por ejemplo derivaron en la muerte de un chofer el fin de semana pasado, y el supuesto fracaso de los corredores seguros. Pero también se abordaban otras problemáticas como la implementación de la tarjeta para el pago, las multas y los remises truchos.

Las cuatro cámaras que nuclean a los taxistas de Rosario asistieron a la asamblea, que comenzó este mediodía y se extendería por espacio de dos horas. Los voceros destacaron que “hoy no se tomará ningún tipo de medida puntual”. Mientras tanto, el servicio de taxis era normal en la ciudad.

El encuentro estaba pactado para las 10 de la mañana de este sábado en el parque Urquiza, pero los organizadores del encuentro decidieron estirarlo hasta el mediodía a la espera de más asistentes.

Después del asesinato del taxista Sergio Quinteros, perteneciente al Sindicato de Peones de Taxis, y luego de la medida de fuerza implementada en el comienzo de la semana, el tema de la seguridad era el tema dominante de la asamblea.

Se avaluaba la eficacia de los corredores seguros, que muchos taxistas catalogaron como “un fracaso” en los últimos días. “El año pasado era 30 los corredores; ahora volvieron a implementarse 17, pero no son suficientes”, describió el presidente de la Cámara de Titulares de Licencias de Taxis de Rosario (Catiltar), José Tornambé.

Los taxistas también discutían sobre la posibilidad de empezar a cobrar el servicio a través de una tarjeta, pero ya adelantaron que lo ven como una alternativa “negativa” porque “esto incrementará en un 20 por ciento el costo para el usuario”.

También trataban el tema de las multas, que en general son para el coche y no para el conductor, y la problemática de los remises truchos, donde los taxistas observan “una falta total de control municipal”.