Casi toda la ciudad se vio afectada este domingo por un corte programado de agua potable, que comenzó a las 4 de la madrugada y se prolongó hasta alrededor de las 14, hora en que el servicio comenzó a reestablecerse progresivamente en los distintos barrios.
El motivo de la interrupción en el suministro se debió a la realización de obras hídricas que Aguas Santafesinas SA (ASSA) llevó a cabo durante la mañana, y que consistieron en un empalme de acueductos “para mejorar la calidad del servicio”, según informó la prestataria.
Las zonas Sur y Sudoeste de Rosario, además de Villa Gobernador Gálvez, eran las se esperaba afectar desde un comienzo, aunque desde las 9 el agua faltó en muchos otros sectores de Rosario a causa de un imprevisto durante la ejecución de los trabajos, de acuerdo a la explicación que dio el vocero de la empresa, Guillermo Lanfranco.
“Cuando se realizan obras de esta magnitud pueden pasar estas cosas y sobre la marcha de las operaciones tuvimos que cortar el agua en zonas que teníamos previsto hacerlo”, dijo el encargado de relaciones institucionales en Radio 2.
En horas del mediodía, la obra quedó finalizada y desde entonces se volvieron a poner en funcionamiento las bombas para la redistribución del agua, que durante la tarde fue regresando a todos los puntos afectados.
La firma, mientras tanto, llevó adelante un operativo especial con cubas para llevar agua a los hospitales y geriátricos que lo demandaron.
Según adelantó Lanfranco a Rosario3.com, ASSA prevé nuevos cortes para continuar su plan de obras, aunque las próximas interrupciones serán menores en tiempo y dimensión y todavía no fueron programadas.
Los trabajos
El empalme, que “se realizó exitosamente y se activará desde febrero o marzo”, se llevó a cabo en Dorrego y Gaboto. De la actividad participaron un buzo y más de 50 operarios y técnicos de Aguas Santafesinas.
Concretamente, se realizó la vinculación o empalme del Acueducto Dorrego (2,2 kilómetros de cañerías por Dorrego desde Gaboto hasta la avenida Uriburu) a la red existente. Este gran tubo, de acuerdo a Assa, aportará un mayor caudal de agua potable al sur y suroeste de Rosario y a Villa Gobernador Gálvez, eliminando los problemas de baja presión.
El primer paso de la operación, iniciada a las 4 de la mañana, fue vaciar las cañerías y redes en las cercanías del área de trabajo, ubicada en Dorrego y Gaboto. Para completar esta instancia y hacer posible el corte de la cañería existente (un metro de diámetro) y así vincularla al Acueducto Dorrego (80 centímetros de diámetro) fue necesario extender la zona de corte de servicio de agua potable a otros sectores de la ciudad, por fuera del sur, suroeste y Villa Gobernador Gálvez, donde se había programado originalmente.
Luego, un hombre buzo, preparado con un equipo de oxicorte, procedió a realizar bajo agua el calado de la cañería existente de 8 milímetros de espesor, una tarea que demandó casi dos horas.
Una vez removido el tapón, operarios de Aguas Santafesinas conectaron las dos cañerías, lo que permitió reanudar paulatinamente el bombeo de agua potable a toda la ciudad.
El motivo de la interrupción en el suministro se debió a la realización de obras hídricas que Aguas Santafesinas SA (ASSA) llevó a cabo durante la mañana, y que consistieron en un empalme de acueductos “para mejorar la calidad del servicio”, según informó la prestataria.
Las zonas Sur y Sudoeste de Rosario, además de Villa Gobernador Gálvez, eran las se esperaba afectar desde un comienzo, aunque desde las 9 el agua faltó en muchos otros sectores de Rosario a causa de un imprevisto durante la ejecución de los trabajos, de acuerdo a la explicación que dio el vocero de la empresa, Guillermo Lanfranco.
“Cuando se realizan obras de esta magnitud pueden pasar estas cosas y sobre la marcha de las operaciones tuvimos que cortar el agua en zonas que teníamos previsto hacerlo”, dijo el encargado de relaciones institucionales en Radio 2.
En horas del mediodía, la obra quedó finalizada y desde entonces se volvieron a poner en funcionamiento las bombas para la redistribución del agua, que durante la tarde fue regresando a todos los puntos afectados.
La firma, mientras tanto, llevó adelante un operativo especial con cubas para llevar agua a los hospitales y geriátricos que lo demandaron.
Según adelantó Lanfranco a Rosario3.com, ASSA prevé nuevos cortes para continuar su plan de obras, aunque las próximas interrupciones serán menores en tiempo y dimensión y todavía no fueron programadas.
Los trabajos
El empalme, que “se realizó exitosamente y se activará desde febrero o marzo”, se llevó a cabo en Dorrego y Gaboto. De la actividad participaron un buzo y más de 50 operarios y técnicos de Aguas Santafesinas.
Concretamente, se realizó la vinculación o empalme del Acueducto Dorrego (2,2 kilómetros de cañerías por Dorrego desde Gaboto hasta la avenida Uriburu) a la red existente. Este gran tubo, de acuerdo a Assa, aportará un mayor caudal de agua potable al sur y suroeste de Rosario y a Villa Gobernador Gálvez, eliminando los problemas de baja presión.
El primer paso de la operación, iniciada a las 4 de la mañana, fue vaciar las cañerías y redes en las cercanías del área de trabajo, ubicada en Dorrego y Gaboto. Para completar esta instancia y hacer posible el corte de la cañería existente (un metro de diámetro) y así vincularla al Acueducto Dorrego (80 centímetros de diámetro) fue necesario extender la zona de corte de servicio de agua potable a otros sectores de la ciudad, por fuera del sur, suroeste y Villa Gobernador Gálvez, donde se había programado originalmente.
Luego, un hombre buzo, preparado con un equipo de oxicorte, procedió a realizar bajo agua el calado de la cañería existente de 8 milímetros de espesor, una tarea que demandó casi dos horas.
Una vez removido el tapón, operarios de Aguas Santafesinas conectaron las dos cañerías, lo que permitió reanudar paulatinamente el bombeo de agua potable a toda la ciudad.
