Si prospera un proyecto de ordenanza del concejal Jorge Boasso, en 2007 los transportes escolares que operan en la ciudad deberán contar con cinturones de seguridad y cabezales en los asientos. El proyecto no es nuevo, pero se está terminando de redactar para ser presentado en la última sesión extraordinaria y ser aprobado sobre tablas en marzo próximo.

El proyecto del edil radical apunta a reglamentar el transporte escolar para prevenir accidentes y preservar la vida de los menores. En este sentido, la normativa hace hincapié en el cinturón de seguridad como “elemento básico para la seguridad de los niños”, pero también sugiere la incorporación de un apoya cabeza en cada asiento de los vehículos escolares.

La reglamentación implica que los transportes escolares tengan los tradicionales cinturones de tres puntos que utiliza el conductor, el acompañante y quien está detrás como pasajero. También establece que hay cinturones en todos los asientos y que cada uno tenga su respectivo cabezal.

Por su parte, los transportistas plantean los beneficios e inconvenientes que les provocaría la nueva reglamentación. “En realidad no hace falta poner cinturones a todos los chicos porque los conductores manejamos con total precaución y porque nos haría muy lento el trabajo", explicó Amalia Marchetti, integrante de Transportistas escolares a Rosario3.com. "Sería una pérdida de tiempo total bajar en cada esquina para poner o sacar los cinturones de los chicos que suban o bajen del coche”, agregó.

Otra posición asume Daniel, dueño de un transporte escolar que desde hace varios años trabaja en la ciudad. Para él, al igual que para otros, no sería descabellado el proyecto de Boasso, siempre y cuando les den un tiempo razonable y algún apoyo financiero para ponerlos en práctica.

El impulsor de la norma indicó que “la intención es que los chicos viajen sentados y con seguridad, que la combi que transporte alumnos tenga establecida su capacidad y que cumpla con estas condiciones”.