En cuestión de horas, el presidente de Paraguay Fernando Lugo fue destituido por el Congreso y reemplazado por su vice, Federico Franco. En el medio de ambas acciones, toda este viernes a la tarde, el ex obispo aceptó esa decisión mientras que los mandatarios de la región, como Cristina Fernández de Kirchner, Dilma Rousseff y Rafael Correa, repudiaron el procedimiento y amenazaron con sanciones de la Unasur. 

Cristina confirmó que "Argentina no va a convalidar el golpe de Estado en Paraguay" y adelantó que se decidirá un "curso de acción" con los países de la región.

"Argentina no va a convalidar el golpe de Estado en Paraguay" dijo la presidenta en la Sala de Periodistas de Casa de Gobierno y fundamentó que "Unasur ha tenido un pronunciamiento unánime en Río de Janeiro" sobre el proceso que terminó con la destitución del presidente Fernando Lugo.

“Estas son situaciones que creíamos absolutamente superadas en la región”, agregó Cristina, quien señaló la gravedad del tema más allá de la postura de Lugo de dar un paso al costado.

Por su parte, el presidente del Ecuador, Rafael Correa, anunció que su gobierno no reconocerá a Federico Franco como presidente de Paraguay.

“El gobierno de Ecuador no reconocerá otro presidente de Paraguay que no sea el presidente Fernando Lugo”, recalcó Correa al regresar esta noche de Rio de Janeiro de la cumbre de las Naciones Unidas para el Desarrollo Sustentable y tomar conocimiento de la votación en el Senado guaraní, según reportó la estatal agencia Andes.

El mandatario advirtió que “los países de la Unasur tienen el derecho y el deber de velar para que en base a formalismos no se esté rompiendo la legitimidad de la democracia en Paraguay”.

Lugo aceptó la destitución

Con un discurso en la Casa de Gobierno, el presidente de Paraguay, Fernando Lugo, aceptó este viernes la decisión del Senado, que votó su destitución, aunque advirtió que en ese proceso fueron "transgredidos todos los principios de la defensa de manera cobarde y alevosa".

El mandatario consideró que "la democracia, ha sido herida" con la decisión del Senado votada de manera veloz en el juicio político por el desalojo de un campo que causó 16 muertos.

"Esta noche salgo por la puerta más grande de la patria, salgo por la puerta del corazón de mis compatriotas", dijo Lugo en medio del aplauso de sus colaboradores, presentes en su despedida en el Palacio de Gobierno.

La votación del Congreso registró 39 votos a favor de la destitución, cuatro en contra y dos ausentes.

Afuera del Parlamento, una nutrida manifestación resistía lo que denunciaron como “un circo” y un “golpe de Estado” que significaría el “regreso de la dictadura”. Se registraron incidentes a la salida de la sede legislativa.

El vicepresidente Federico Franco debía asumir la jefatura del Estado. Nacido en Asunción el 23 de julio de 1962, Franco pertenece al Partido Liberal Radical Auténtico (PLRA), el principal apoyo de Lugo hasta el jueves.