El presidente Mauricio Macri se refirió este viernes por primera vez al acuerdo político entre el gobierno nacional y sectores del PJ para lograr estabilidad y pidió “generosidad”. Sin embargo, casi en paralelo, Sergio Massa, uno de los líderes apuntados, reclamó que el Ejecutivo debe reconocer el fracaso de sus medidas y convocar “a todos los sectores” para que el convenio no sea una “trampa electoral”.

Macri aseguró durante la inauguración en Neuquén del oleoducto Loma Campana para el yacimiento Vaca Muerta que "es momento de tener generosidad, sentarse en una mesa y acordar".

"En medio de tantas dudas que tiene el mundo de si vamos a volver atrás o vamos a continuar por este camino, yo he invitado a todos a que firmamos acuerdos, consensos sobre las cosas básicas, elementales que vamos a respetar. Esas herramientas que me permitan decirle al mundo que esto que hemos empezado va a continuar", aseguró el mandatario según Clarín.

"Este es un año histórico, bisagra. Se define si tendremos 25 años de crecimiento permanente o si volvemos a sumirnos en la oscuridad y la confrontación. Es momento de tener generosidad, sentarse en una mesa y acordar", agregó Macri.

El líder del Frente Renovador, Sergio Massa, uno de los apuntados para ese acuerdo, criticó la forma en que el gobierno negocia con parte del peronismo. "El acuerdo no puede ser pensado para dividir a los opositores", dijo.

Para Massa, la propuesta del Ejecutivo nacional excluye a “la mayoría de los sectores, a parte de la oposición, a las pymes, a los trabajadores".

El líder renovador reclamó que “no se puede delegar un acuerdo en operaciones de los diarios”, por los primeros trascendidos y dijo que “el presidente debe asumir la tarea en persona”.

"¿Qué dirigente sensato pude pensar que no queremos seguir honrando nuestros compromisos?", se preguntó Massa. "Pero el diálogo y el consenso no se construyen por WhatsApp. A mí me este decálogo del gobierno me llegó reenviado por WhatsApp. No estamos negociando con ellos", dijo según citó La Nación.

Además, reclamó, “es necesario que el gobierno reconozca su fracaso” y que llame a todos por igual sin distinción, porque “no quisiera pensar que estamos ante una trampa electoral”.

El gobierno negocia con el peronismo no kirchnerista una declaración conjunta de 10 puntos, que den la sensación de estabilidad y continuidad del plan económico. Pero tiene, también, la meta de aislar la eventual candidatura de la expresidenta Cristina Kirchner en la oferta electoral.

El acuerdo incluye el "respeto a la ley, los contratos y los derechos adquiridos con el fin de consolidar la seguridad jurídica, elemento clave para promover la inversión". Y también el "cumplimiento de las obligaciones con nuestros acreedores".

El gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, y el senador Miguel Pichetto, se habían manifestado a favor. En cambio, otro posible precandidato presidencial, Roberto Lavagna, rechazó el acuerdo en diez puntos básicos para tranquilizar a los mercados financieros.

"No hay que jugar con las expectativas de la gente a partir de la especulación política y los titulares de los diarios. Consenso es escucha sincera de los que piensan distinto, no marketing", analizó Lavagna.