Un total de 16.273 iraquíes murieron en actos de violencia en el año 2006, lo que supone el mayor número de víctimas registrado desde que comenzó en 2003 la ocupación del país, según cifras del Ministerio de Interior iraquí.

Entre las víctimas figuran 14.298 civiles, 1.348 policías y 627 soldados del Ejército iraquí, detalla un comunicado divulgado anoche.

Estas cifras son las primeras divulgadas por el Ministerio de Interior desde que se desató la insurgencia en el país, días después de que fuera derrocado el régimen del presidente iraquí Sadam Husein, tras la ocupación de Irak el 20 de marzo de 2003.

Según analistas iraquíes, la mayoría de los civiles muertos lo fueron durante la ola de "violencia sectaria" que se desató después del atentado el 22 febrero del pasado año contra un mausoleo chií en Samarra, 125 kilómetros al norte de Bagdad.

El anuncio del recuento de víctimas iraquíes en el 2006 ha coincido con el de los soldados estadounidenses, que alcanzó los 3.000 desde que se iniciara en 2003 la invasión y posterior ocupación de Irak por tropas multinacionales lideradas por Estados Unidos.

Durante el mismo periodo, más de 20.000 uniformados estadounidenses han resultado heridos, según el mando militar estadounidense.