“Están vivendo bien los rosarinos”. El intendente de Victoria, César Gracilazo, le restó importancia a las quejas que de este lado del río se producen por la quema de pastizales en las islas y relativizó los supuestos efectos nocivos que esa práctica produce sobre la población. Es más, para el jefe comunal de Victoria son los entrerrianos los que sufren por la contaminación que, según él, se produce de este lado del Paraná y que afecta a las islas. Además, tantó él como el delegado de Islas, Gustavo Spadillero, manifestaron en un informe que se vio en De 12 a 14, por Canal 3, su oposición a que se cree un parque nacional en la zona del Alto Delta, como proponen los senadores santafesinos Roxana Latorre y Carlos Reutemann, y plantearon que el tema es una cuestión de soberanía. Un productor consultado en el informe fue más allá: "No vamos a dejar que pongan un pie en nuestras islas".

Mientras tanto, el gobernador Joge Obeid anticipó que en el encuentro que mantendrá mañana con su par entrerriano, Jorge Busti, le planteará la posibilidad de pedir que "algún organismo nacional, como Prefectura o Gendarmería, se encargue de vigilar la zona" al menos en épocas de sequía, para mantener bajo control la quema de pastizales. Lo que supondría admitir la imposibilidad de Entre Ríos para controlar su propio territorio.  

Obeid mantuvo ya una charla telefónica sobre el tema con Busti, en la que justamente el entrerriano aceptó las dificultades que tiene para realizar las tareas de control en las 350 mil hectáreas de islas.

Gracilazo, en tanto, habló con Radio 2 e hizo saber también su oposición a la creación de un parque nacional en la zona de islas. “El proyecto se ha planteado en forma irresponsable, porque dentro del área donde se pretende aplicar hay propiedad privada”, afirmó.

"Se quieren entrometer en territorio nuestro", enfatizó.

El que le contestó fue el intendente Miguel Lifschitz, que aclaró: "No nos interesa quedarnos con las islas, pero nos interesa que se preserve ambientalmentte las islas, ese humedal que es patrimonio de la humanidad".

Garcilazo, en tanto, insistió en que la mayoría de los que encienden fuego en las islas son productores de la propia provincia de Santa Fe.

Gracilazo pidió que se considere la situación climática que hace que no sólo se quemen los pastizales de las islas sino de todos los campos que, por ejemplo, “rodean la ruta 9 desde Rosario a Buenos Aires”.

Además, sostuvo que hay que considerar el hecho de que las islas son “desde hace 200 años, cuando se asignó a un hermano de Belgrano la del Espinillo, terreno de explotación ganadera. Ir contra 200 años de historia nos va a llevar un largo rato”, ironizó.

En este marco, el intendente victoriense no pareció muy optimista en cuanto a los resultados que pueda tener la reunión de mañana entre los gobernadores Joge Obeid y Jorge Busti.

Fue entonces que le restó importancia a las denuncias de contaminación: “Yo pienso que están viviendo bien los rosarinos”. Y luego dijo que los habitantes de las islas “también padecen dificultades generadas por la contaminación que se produce en Rosario”.