La bronca y la impotencia tienen justificativo y todavía perduran, pero está claro que los jugadores de Newell’s no deben perder un minuto más en lo que pasó con el árbitro Gabriel Favale en la caída ante Banfield, para empezar a proyectar el duelo del sábado contra Atlético Tucumán. Así lo entiende Diego Mateo, quien envió un mensaje superador a lo que sucedió el último viernes.
“Todavía dura un poco la bronca y la amargura por haber perdido este partido, si no fuera por diferentes circunstancias, podríamos haber traído un resultado mucho mejor”, reconoció primero Pomelo, y luego agregó: “Lamentablemente fue determinante, pero ya está, tampoco hay que volverse locos y hay que empezar a preparar de la mejor manera el partido que viene. Lo de Favale ya pasó”.
“Uno está con las pulsaciones a mil en el partido y es difícil controlarse, pero es algo que tenemos que hacer para que no nos expulsen jugadores y para mantener la idea de juego hasta el final”, señaló el mediocampista, a propósito de los nervios del final, con la roja a Rolando Schiavi incluida.
Se perdieron tres puntos y La Lepra cayó casi a la mitad de la tabla, pero Mateo analiza: “Todavía falta, hay que seguir luchando partido a partido, después se irá viendo para que estamos; hay que ganar el que viene y seguir sumando”.
¿Se puede continuar con la línea de tres en defensa sin Schiavi? “Sí, el Flaco es fundamental para nosotros, pero hay otros defensores preparados para jugar y con este esquema el equipo se sintió muy cómodo”, respondió Mateo en el final de la nota.
Mateo habló sobre la forma de juego del equipo
