“No es que quiero tomarme un año sabático pero sí me voy a alejar por un tiempo de los escenarios”, aseguró Soledad Pastorutti, en una nota exclusiva en el programa Diez puntos, que conduce Luis Novaresio por Radio 2.

La decisión de la cantante se da al cumplir los diez años de carrera. Según explicó, en parte tiene que ver con descansar por un tiempo para disfrutar de lo que será su nueva vida de casada pero también está vinculada con sus intenciones de juntar fuerza antes de trabajar para proyectarse en el exterior.

Por eso, para el 2007 la cantante de Arequito decidió parar un poco la pelota y repensar su proyecto artístico. “Siento que en estos años pasaron muchas cosas y que no tuve la oportunidad suficiente de disfrutar todo eso”, reflexionó Soledad. Y añadió: “Se lo propuse a la gente de mi productora que trabaja conmigo y se lo tomaron bien porque a ellos les sirve que un artista se siente a pensar como seguir produciendo”.

De cara a este año casi sabático, Soledad también tuvo oportunidad de echar por tierra aquellos comentarios que estos años hicieron foco en una supuesta rivalidad con Mercedes Sosa. "Nos encontramos el 25 de mayo y nos tocó compartir escenario con una grana cantidad de artistas. Yo tenía que irme a tocar a otro lado pero me quedé justamente para evitar que hablaran de más", explicó Soledad. Y abundó: "Después de ahí, me invitó a comer hace poco, estuvimos hablando mucho. Fue muy emocionante el encuentro".

Con 26 años recién cumplidos ( su cumpleaños es el 12 de octubre), Soledad tiene prevista una despedida a lo grande en la ciudad este viernes 20 de octubre.

El show que se realizará en el teatro El Círculo tendrá las mismas características que los brindados en el Gran Rex de Buenos Aires. La actuación será para despedir su disco Diez años de soledad, y también servirá como una despedida de soltera pero junto al público.

Es que la joven cantante ya está en los últimos preparativos para su boda con Jeremías, que se concretará en 2007. “Últimamente me reparto entre la música y los detalles de la fiesta, que aunque para un hombre no sean tan importantes para una mujer son imprescindibles. Como el vestido, el peinado y la ubicación de las mesas”, contó Soledad.