La iniciativa para avanzar en la castración química de violadores en Mendoza lanzada por el gobernador Celso Jaque generó conmoción en esa provincia. Sin embargo, el mandatario ya anunció la conformación de un Comité Científico para justificar "la instrumentación” de esa medida.

Jaque dijo este miércoles que en 48 horas estará listo el decreto que autorice el funcionamiento de ese ente especial. Lo hizo en conferencia de prensa acompañado por los ministros Carlos Ciurca (de Seguridad), Sergio Saracco (Salud) y Alejandro Cazabán (Secretaría de la Gobernación) y el presidente de la Cámara de Diputados Jorge Tanús.

Según indicó el propio mandatario y reprodujo el portal mendocino Mdzol.com, mostró su oposición hacia la posibilidad de la castración quirúrgica, pero aseguró la castración química como " un proyecto que va un paso adelante de cualquier otra medida".

Sin embargo, no existe una medida similar en la  provincia, por lo cual para lograr que sea efectiva habrá que realizar una reforma en el Código Procesal Provincial y de ser posible en el Código Penal Argentino.

Pero desde el Ejecutivo, saben que para lograr estos cambios de la legislación actual a nivel nacional, es necesario presentar un proyecto en el Congreso Nacional y luego efectivizar la medida, una tarea bastante complicada de concretar. Y si esto se realiza a nivel provincial, a partir de los cambios en el Código Procesal Provincial, el violador por propia voluntad, tendría que pedir el medicamento ya que no sería una medida obligatoria sino voluntaria.

Sobre ese punto, Omar De Marchi, uno de los diputados nacionales por Mendoza, ya adelantó que la idea del gobernador “es una locura”.

“No se responde así, se responde con ciencia, con especialistas, con expertos. Es decir, con un sistema integral no con exabruptos ni frases espasmódicas. Las cosas se deben tomar con seriedad y no declarando tonterías”, afirmó el representante del Partido Demócrata, señala ese portal.

El parlamentario aprovechó además para cargar contra la figura del mandatario provincial al reconocer que sus dichos “son palabras propias de una persona impotente que no ha podido, ni puede, resolver un solo problema de los mendocinos”.