Unos 89 millones de mexicanos fueron habilitados para acudir este domingo a las urnas para optar por el continuismo que presentan los partidos de centroderecha (PRI y PAN) o dar un giro político a la izquierda con el candidato Andrés Manuel López Obrador, que partía como favorito.

Después de diez horas de votación y del cierre de los primeros colegios electorales, por la noche comenzó el recuento de los sufragios, que en estas elecciones era más complejo debido al alto número de cargos que se disputan.

Los primeros datos que se daban a conocer por la noche eran los de sondeos a pie de urna.

Las encuestas sobre los comicios a nivel federal -por los que se eligen al presidente del país, diputados y senadores- debían esperar a que cerraran los centros de votación de los estados del oeste del país, con los que hay una diferencia de hasta dos horas.

No obstante, sí empezaban a ver la luz aquellos sondeos sobre los resultados de las ocho gubernaturas que están en juego, además de la jefatura de la Ciudad de México.

De acuerdo con una encuesta de salida Consulta Mitofsky, Claudia Sheinbaum, de Movimiento Regeneración Nacional (Morena), venció en las elecciones de la Ciudad de México, mientras que en varios estados donde se elige gobernador iba por delante la coalición de izquierdas liderada por Andrés Manuel López Obrador.

Los primeros datos oficiales que se iban a brindar eran los del conteo rápido, mecanismo del INE que refleja las tendencias de votación a partir de una muestra de unas 7.700 casillas (mesas electorales).

La muestra, de acuerdo con el órgano electoral, es "suficientemente grande para obtener una estimación con un margen de error muy pequeño respecto de la votación real".

Se calculaba que aproximadamente a las 23 (a la 1 de la madruga del lunes en Argentina) se podían conocer los primeros datos del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP).

Elecciones históricas

Con un país marcado por los altos niveles de corrupción y niveles históricos de inseguridad, las encuestas previas mostraban que una amplia mayoría respalda a López Obrador, líder del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), que por tercera ocasión consecutiva se presentó a la presidencia de México.

Desde 1929 ha gobernado el Partido Revolucionario Institucional (PRI), salvo los dos sexenios del Partido Acción Nacional (PAN) con Vicente Fox (2000-2006) y Felipe Calderón (2006-2012), y los sondeos de opinión dan a López Obrador un apoyo cercano al 50 por ciento, lo que supondría que la izquierda llegaría por primera vez a la Presidencia.

López Obrador ha logrado agrupar en torno a Morena varias corrientes de pensamiento político, y para los comicios va en coalición con el Partido del Trabajo y Encuentro Social, este último una agrupación evangélica que ha mostrado una posición muy conservadora en temas como el matrimonio homosexual y el aborto.

El político se midió con el conservador Ricardo Anaya, de la coalición conformada por el PAN, el Partido de la Revolución Democrática (PRD) y Encuentro Social, y el oficialista José Antonio Meade, abanderado de la alianza entre el PRI, el Verde Ecologista de México y Nueva Alianza.

También participó Jaime Rodríguez Calderón, alias "el Bronco", quien es el primer candidato independiente en participar en unas elecciones presidenciales, gracias a la reforma político-electoral de 2014.