El tandilense Juan Mónaco se metió entre los ocho mejores del torneo de tenis ATP de Buenos Aires, al derrotar al español Carlos Moyá, tres veces campeón en el torneo porteño, en tres sets.

Mónaco, ubicado en el puesto número 66 del ránking mundial, ejerció predominio sobre el mallorquín Moyá (47 y quinto preclasificado), que le permitió ganar con parciales de 6-4, 6-7 (3-7) y 6-0.

De esta manera, el tandilense se medirá hoy desde las 19.30 con el peruano Luis Horna, verdugo del bonaerense Guillermo Cañas, en uno de los duelos de cuartos de final.

En un Lawn Tennis Club que en la pasada medianoche ya tenía muchas menos personas de las 6 mil que colmaron las instalaciones al promediar la jornada, el argentino se impuso en el primer segmento, a partir de la remontada que protagonizó en el noveno game.

Es que con el partido 4-4 y 0-40, con su saque, el tandilense se recuperó y no solamente conservó su servicio para adelantarse en la pizarra sino que además se dio el gusto de quebrarle al español en el décimo juego para llevarse el primer capítulo.

En la segunda manga, Moyá (campeón en Buenos Aires en las ediciones 1995, 2003 y 2006, en la última venciendo en la final al italiano Filippo Volandri) intentó prevalecer con su drive de derecha tan característico.

Y el tandilense, tal vez un poco nervioso por la instancia que estaba disputando, se aceleró y entró en un pequeño período de confusión.

Por eso, Moyá tomó ventaja de 4-3 hasta que cometió errores forzados en el octavo juego y permitió que el tandilense tomara la delantera (5-4). Ambos jugadores conservaron sus respectivos servicios y la definición se estiró hasta el tie break.

En la etapa de definición, el español estuvo más certero y ganó por 7-3, para empatar el desarrollo.

En el tercer parcial, el tandilense quebró en tres oportunidades el saque de su adversario (juegos 1, 3 y 5) y sentenció el pleito con comodidad, al ponerse 5-0 arriba.

La frutilla del postre llegó en el sexto y último game del capítulo, con un Mónaco que fue preciso, aprovechó los errores no forzados del español y terminó sellando uno de los triunfos más importantes de su trayectoria.